Si queremos hablar de los mayores testimonios perdidos de la Guerra Civil española y cómo se sintió ésta en Madrid, entonces toca hacer una parada obligatoria al desaparecido Hotel Florida, el cual se ubicó en la Plaza de Callao, esquina con la Calle del Carmen. Éste extinto lugar fueron los ojos del mundo para conocer cuánto ocurría en nuestro suelo durante aquellos aciagos años. Un hermoso edificio en cuyos pasillos y habitaciones se vivió este conflicto de un modo muy especial. Ahora sabremos porqué.
Levantado en 1924 fue otra de las tantas maravillas que aportó el arquitecto Antonio Palacios a Madrid. Constaba de más de 200 habitaciones con todo lujo de equipamiento, como wc privado y teléfono, y una impecable fachada de mármol que acaparó muchísimos elogios. Sin embargo, su gran protagonismo y relevancia histórica llegó en 1936 al estallar la guerra.
El Hotel Florida, dada su fantástica situación, fue el elegido por los corresponsales de guerra, fotógrafos y demás trabajadores del sector periodístico para alojarse en Madrid mientras informaban al exterior de cuanto sucedía en la capital. Algunos de los célebres periodistas que en él vivieron durante estos duros años fueron Mijaíl Koltsov, del Pravda; Henry Buckley, de The Daily Telegraph; Geoffrey Cox o Herbert L. Matthews, de The New York Times. También se alojarían en él el escritor.
Otros nombres que seguramente os sonarán más fueron el escritor americano John Dos Passos, quien publicó para Esquire su "Habitación con baño en el Hotel Florida". Además, un cliente del Florida fue el siempre presente Ernest Hemingway, quien desde su habitación 109 redactó numerosas crónicas e incluso, con el sonido de los bombardeos de fondo, escribió una de sus escasas piezas teatrales 'La quinta columna'. Hemingway tuvo tiempo en este hotel de escribir...y de algo más, puesto que aquí coincidió con su amante Martha Gellhorn, enviada especial de otra publicación americana.
El fotógrado Robert Capa también habitó este hotel durante estos grises días y es que, como os decía, buena parte de la prensa internacional se congregó aquí. ¿Os imagináis lo que se tuvo que ver y escuchar por sus pasillos? Periodistas corriendo de un lado a otro para enviar sus textos a tiempo, reuniones clandestinas, tensiones, secretos...sin lugar a dudas unos momentos trepidantes que se borraron de la memoria en el año 1964. Fue en aquel año cuando se decide derribar este notable edificio para levantar en su puesto un Galerías Preciados, origen del actual Corte Inglés. Una durísima pérdida tanto histórica como arquitectónica para nuestro querido Madrid.