Hoy me apetece hablar un poco de un tema que hasta hace cuatro días era portada de muchos telediarios, pero que con la cuestión catalana se ha dejado un poco aparcado, supongo que por lo menos hasta que haya alguna imagen que sea más impactante que la de los muñecos colgados.
Hablo de una cuestión que a pesar de que ha tenido su boom, y este parece haber pasado en la prensa, ha existido desde siempre, y que por desgracia me parece que va a seguir pasando por lo menos unos cuantos años más porque es un tema de cultura.
La principal razón por la que escribo esto es porque me han venido un par de historias que me ha contado mi novio de cuando él ha jugado al fútbol, y las cosas que me cuenta que ve hoy que lleva unos cuantos años más practicando otros deportes.
Las dos cosas que más me han impactado, han sido escuchar como un señor amigo de mi padre que ahora es fontanero, y que nos ha ayudado a mí y a mi novio ha arreglar nuestra casa, insultaba a mi novio de una forma brutal cuando sólo tenía nueve o diez años sólo por jugar contra su hijo, al que no pegó nunca una patada, y según mi novio lo único que hacía era defenderlo bien, y el hijo de este señor cuando jugaba contra el equipo de mi novio no metía goles.
Y la otra cosa, es como una señora que iba a ver a un equipo de fútbol que no hace tantos años era de segunda división, le hacía carantoñas y era lo más simpático del mundo con mi novio cuando estaba su padre delante (porque su padre era directivo de ese equipo de fútbol), pero luego cuando mi novio, que jugaba en otro equipo, jugaba contra el hijo de esta señora, no sólo le insultaba, sino que también le lanzó objetos una semana antes por simplemente jugar un partido contra el equipo de su hijo, aquí si no recuerdo mal me dijo que tenía catorce o quince años.
Y todo esto mi novio me lo cuenta como algo normal, que es parte del juego, y que como estas cosas no le gustaban, puesse acabó por decidir a dejar el fútbol definitivamente para jugar al otro deporte que practicaba, y aún hoy lo hace, que es el rugby deporte, en el que me ha dicho que se pegado dentro del campo mil veces mil golpes, pero en el que este tipo de comportamientos son algo muy excepcional, y si pasa algo así en un partido de rugby de niños, los propios padres de los compañeros de su hijo son los que le explican al padre que se porta de esta manera que en ese deporte ese tipo de comportamientos no están bien vistos, y que debe tener respeto por los niños del otro equipo y por los compañeros de su hijo, todo eso con una sola frase “yei, que esto no es fútbol”.
Creo que no hace falta comentar como funciona normalmente la seguridad en partido de fútbol en el que no se puede meter muchas veces ni un tapón de una botella de agua, lo que me ha extrañado a mí es que mi novio me ha comentado que en los partidos de rugby está permitida la venta de alcohol, de hecho es una parte del juego el ver los partidos con una cerveza en la mano, y además no se separan a los aficionados de los equipos en gradas distintas. En las gradas se ve a gente de los dos equipos con una cerveza en la mano y viendo el partido juntos, esto es algo muy típico de reino unido. A mi me extraña un montón ver como están en esta situación aficionados que luego se enfundan una camiseta de fútbol y se ponen a romperlo todo y pegar a la gente.
Creo que las imágenes de padres pegándose en partidos de fútbol vienen por la propia cultura del deporte, y aunque ante todo este tipo de situaciones los niños se están portando de forma excepcional, no hay que olvidar que esos mismos niños que ahora se portan tan bien, posiblemente cuando lleguen a la edad del pavo van a ser como sus padres, porque es lo que les han enseñado.
Lo que me ha enseñado mi novio que son los valores del rugby, son principalmente respeto y agradecimiento, a los árbitros, a los compañeros, y a los rivales, porque si falta alguno de ellos no se puede disfrutar de la experiencia de un partido, es un deporte en el que se integran juntos los niños más pequeños y más tímidos con los que son más gorditos y les cuesta más correr, y todos necesitan de todos y se apoyan. Y muchos de estos valores los he visto también cuando he escuchado hablar a jugadores de otros deportes como balonmano o baloncesto.
No quiero con esto criticar al deporte del fútbol de por sí, a mí y a mi novio nos gusta el fútbol, pero la cultura y los valores que transmite la gente no son los mismos que comentaba hace un momento. Mi novio es del Hércules, y dice que a él le gusta que le vaya bien al elche, y siempre dice lo mismo, que si disfruta de derbi en segunda b, una final de copa del rey Hércules contra el elche sería la fiesta más grande de la provincia en siglos, sin importar quien acabase ganando, y por decir esto le miran raro, y es que por lo visto en fútbol hay que desear que desaparezca el equipo rival, y si se puede mejor quemando su estadio también.
Y ese me parece que es el origen de que luego los padres se peguen en los partidos de niños, entre otras cosas creo que este es el origen porque estoy casi segura de que la mayoría de esos padres no piensa que su hijo vaya a ser profesional, creo que los hay, pero que son los menos, y creo que son los mismos que les trasmiten luego unos valores a sus hijos que les llevan a pensar que vale más la pena cuidar su imagen y tratar de ir a la tele como Rafa Mora, que estudiar y tratar de tener una profesión el día de mañana, como digo, por suerte creo que estos son los menos.
Y ya identificado el problema, la siguiente cuestión sería como se soluciona, porque creo que a pesar de que ya no salga en las noticias estas escenas, creo que sí se siguen dando, espero que en menor medida porque haya algo más de gente con vergüenza, pero estoy segura de que sigue pasando. Y teniendo en cuenta la cosa es ¿cómo cambiamos la cultura de un deporte?
Por un lado toda la lucha que hacen desde la FIFA contra el racismo son una buena forma de comenzar si se le siguen añadiendo más valores, porque al final es triste pero lo borregos hacen lo que les dice el pastor, y si Messi dice que no hay que ser racista los borregos dejan de serlo, y si Cristiano dice que es más importante meter un gol para mantener a los patrocinadores que el que gane tu equipo, el borrego lo que hace es enseñarle a su hijo que aunque practique un deporte de equipo se olvide de sus compañeros (ojo, esto es un ejemplo, me cae mejor Cristiano que Messi).
Creo que las iniciativas de hacer varios anuncios de niños diciendo a sus padres lo que tienen que hacer están muy bien, pero me parece que los borregos no van a hacer caso a los niños, y creo que la solución a lo de los padres aquí, a los hooligans en reino unido… y en general la solución al tema de la violencia del fútbol pasa más porque las altas esferas se preocupen menos de los escandalosos mundiales en sitios que sólo ofrecen sobornos, perdón incentivos, como el mundial de rusia o el mundial de qatar, y hay que tomarse en serio sacar la violencia del fútbol, que muchas veces está mezclada con criminalidad que usa el deporte como tapadera. Pero precisamente por eso creo que es importante separar el trigo de la paja, desde la FIFA se pueden transmitir unos valores que saquen a los borregos de la violencia, y así la policía podrá hacer su trabajo y quitar esa tapadera.
Al final la FIFA ha decidido hacer del fútbol un negocio más que un deporte, y eso hace que deje de ser un juego, y por triste que parezca se ven a niños de quince o dieciséis años con lesiones a los que se sigue apretando hasta que no se rompan. Es importante transmitir que las patadas no son parte del juego, pueden ser parte de la profesión de Sergio Ramos, pero él es un profesional defendiendo su puesto de trabajo, en un entorno medido y con una cabeza lo bastante bien amueblada para saber lo que es y lo que implica el dar una patada. Para los niños, dar una patada nunca debería ser parte del deporte y por desgracia lo es, y cuando no lo es porque lo manda el entrenador, lo es porque el padre le dice al hijo que pegue patadas porque hay que ganar a cualquier precio. A mi novio, que jugaba de defensa, le enseñaron que o pasaba la pelota o pasaba el tío, pero las dos cosas juntas nunca, y esto se lo dijeron con nueve años y se lo dijo su padre, mientras esta siga siendo la cultura, las cosas mucho me temo que no van a cambiar.
Creo que los niños practiquen el deporte que practiquen sólo son niños y siempre van a ser buenos, y creo también que la mayoría de los que trabajan con esos niños de verdad son buena gente que trata de transmitir buenos valores a los niños, pero al final al niño se le educa en casa, y si papá borrego dice que hay que meter goles a cualquier precio, y que el fútbol es lo más importante del universo todo va a seguir enrarecido, y por desgracia papá borrego, en lugar de hacer caso al niño cuando dice que así no disfruta, sólo hace caso a lo que dice el balón de oro de turno, y ellos dicen lo que la FIFA y los patrocinadores les dicen que digan.
Por lo menos yo lo que creo que es que o el fútbol vuelve a ser un juego en lugar de un negocio, o la cosa me parece que por desgracia no va a ir a mejor, porque aunque antes no saliese en la tele, lo de las peleas en los partidos de fútbol de chiquillos no son algo de este siglo, vienen de muy atrás y si no cambian las cosas no van a dejar de producirse, pero que la gente tenga claro que aunque ya no estén saliendo en la tele esas cosas siguen pasando.