Los pantalones apretados son perjudiciales para tu salud

A las personas de ambos sexos nos encanta entrar en el probador y ver que unos pantalones marcan perfectamente nuestras posaderas. Pero peor es aún el caso de los vaqueros hiperceñidos, que según indica la revista Journal of Neurology Neurosurgery & Psychiatry, resultan muy perjudiciales para nuestra salud ya que estos pantalones apretados causan problemas vasculares y complicaciones circulatorias.

1. El desencadenante de esta noticia elaborada por la revista de divulgación ha sido una mujer de 35 años, que acabó en el hospital con complicaciones para andar y los pies dormidos tras haber pasado el día anterior varias horas en cuclillas ayudando a una amiga con una mudanza con unos pantalones jeans muy ceñidos. Según explica la mujer, “los vaqueros cada vez se iban haciendo más incómodos y me apretaban más y más”. Tras pasar unas horas notó como se le dormían los pies y posteriormente se cayó al suelo hasta que su amiga la encontró. Al llegar al hospital los médicos se vieron obligados a cortar los pantalones para intentar sacarla de la trampa vaquera que llevaba. Observaron después que tenía varios edemas en las piernas y, tras una prueba de conducción nerviosa, se percataron de que la mujer tenía un bloqueo en los nervios del peroneo. También tenía otra afección en el nervio tibial que le produjo una rabdiomiolisis, que es una descomposición del tejido muscular que acabó necrosando su músculo.

Estas lesiones se produjeron a consecuencia de que la sangre no fluía correctamente y no permite la buena circulación por la gran presión que ejercen los vaqueros. Además de los pantalones hiperceñidos, fue la postura que la chica mantuvo durante horas lo que hizo el resto. Además de los problemas que esta pobre mujer ha padecido, llevar vaqueros muy ajustados puede favorecer la aparición de problemas cardíacos, complicaciones circulatorias como un trombo e incluso una embolia pulmonar o la muerte. Así que recuerda, para estar sexy tienes que estar vivo.

Fuente: QUO