Los parlamentarios conservadores y socialistas, es decir, los populares e impopulares, tan cercanos ellos en sus políticas económicas, han decidido seguir apostando, como siempre por otro lado, por la defensa del establishment que, como también ya saben ustedes, refiérese al conjunto de los poderosos.
Resulta que dos partidos de izquierdas, IU e ICV, ayer en el Pleno del Congreso, instaron al Gobierno a recuperar el impuesto de Patrimonio para gravar a las grandes fortunas. Impuesto que como saben suprimió el Gobierno Zapatero en 2008.
Esos mismos grupos, IU e ICV, también y en la misma sesión, han instado al Gobierno a revisar el Impuesto de Sociedades.
Y ya puestos a proponer, han avanzado un paso más y han solicitado que se implemente un "Plan de lucha contra el fraude fiscal" que incluiría hacer público el listado de las grandes fortunas, titulares de cuentas en Suiza, que están sin declarar. Instan al Gobierno a que les denuncien por un presunto delito contra la Hacienda Pública.
¿Qué creen que ha pasado en la citada sesión? Que excepto los partidos propoentes, es decir IU e ICV, más el BNG y ERC han apoyado las propuestas, negándose a ellas el resto del arco parlamentario que pasa, como también ustedes conocen, por el rodillo de populares e impopulares.
Mientras el señor Bono y el señor Rojo, presidentes del Congreso y Senado, nieganse a que se reforme el régimen de incompatibilidades que tanto favorece a los privados bolsillos de congresistas y senadores.
Mientras leo la noticia de que además, tanto el PP como el PSOE, rechazan la propuesta del BNG de que la hipoteca se salde con la entrega del piso, aún sabiendo la situación terrible de penuria en que se hallan miles de familias en España, vuelves a entender por qué para los ciudadanos el tercer grave problema es el de la clase política.
Entiendo pues a los "indignados" que se hallan a las puertas de muchos parlamentos para recordarles la gran indignación que tenemos gran parte de la ciudadanía.
¡A la calle el día 19!