Siempre queremos automatizar procesos y reducir tiempos en trabajos que no generan valor, por ejemplo introducir datos en sistemas diferentes para una finalidad similar, como la publicación de anuncios de inmuebles en portales inmobiliarios.
En el ámbito del marketing inmobiliario, la descripción de un inmueble, que suele ser detallada y a la que incluso se le incluye narrativa emocional, supone un gran esfuerzo creativo. Generalmente, la misma descripción es usada en diferentes canales, ya que es tediosa la tarea de modificar, ajustar y personalizarla en función del medio en el que se publicite. Por ese motivo se suele recurrir al copia-pega.
La redistribución de información es ventajosa en muchas ocasiones, pero conlleva peligros en otras.
Esos peligros se incrementan cuando en vez de adecuar el contenido original a los diferentes soportes, trasladamos la información exactamente igual a todos los medios.
El famoso copia-pega ahorra mucho tiempo para ciertas tareas, pero es peligroso aplicarlo en ciertas circunstancias. Veamos los peligros de copiar y pegar textos:
1. Sin formato
Al pasar de un sistema a otro, lo habitual es que se pierda el formato original, mostrando en el sistema copiado el texto sin espacios entre párrafos, sin cursivas, negritas, tamaños y colores de fuente…
Si el texto es muy extenso, su lectura se hace complicada si no se da espacio entre párrafos y si todos los puntos son seguidos.
2. Caracteres extraños
Si usas un programa de ofimática, como Word, para crear tu contenido, al copiar, se pueden incorporar caracteres y códigos propios de ese programa, que pueden hacerse visibles en el otro programa o página en el que lo pegues.
La codificación puede ser diferente en una herramienta que en otra, y caracteres habituales en un sitio, no lo son en otro. Cuidado por las “eñes”, “tildes”, “porcentajes”, “exclamaciones”, pueden pasar de mostrarse así: “ñ á % !” a verse de esta otra manera: “ñ á ¡”
Cuidado al usar interrogaciones, exclamaciones, porcentajes de descuento, precios con el símbolo de la moneda (€), alturas (1ª) y superficies en metros cuadrados (m² ) o cúbicos.
3. Contenido duplicado
Enviar la misma información que gestionas para tu propia web a los Portales inmobiliarios, provoca que el contenido se duplique en varios sites, lo que no le gusta nada a Google.
El problema es que aunque en tu web se publique primero, los portales actualizan rápidamente la información y se lo comunican a Google, que atiende mejor a dominios con gran fuerza, como los de los portales, por encima que la de una simple web de una agencia inmobiliaria.
Es decir, que Google te puede penalizar por usar contenido duplicado, aunque seas el autor original. Afortunadamente hay métodos para demostrar la autoría de contenido, mediante el uso de datos estructurados.
Ante el mismo contenido en tu web y en la de un gran portal, ¿qué página crees que mostrará Google primero en sus resultados? Pues eso.
Captura de página SERP en la que consultando parte de un texto de una descripción de una vivienda, ésta sale expuesta en diferentes portales.
4. El mismo texto no funciona para distintos soportes
El texto de la descripción de una ficha inmobiliaria, debe ser diferente si se usa para la web que si se imprime y se coloca en el escaparate de la oficina inmobiliaria.
El texto en la web, con enlaces hipertextuales, no sirve para publicar en una revista inmobiliaria impresa.
Ejemplo de texto en revista de propiedades inmobiliarias, que usa el mismo texto que la descripción de las fichas de inmuebles en la web, con la opción de “Más inmuebles de la zona”, útil en la versión interactiva online, no en la impresa.
5. Incoherencia de la información
Cuando se copian textos extensos, no se suelen revisar, lo que provoca que se ponga información no coherente con el propósito de la página donde se exponga.
Por ejemplo, colocar en las descripciones de inmuebles en tu web que “pueden consultar más información en los teléfonos de pie de página”, y dejar ese mismo texto para publicarlo en otras webs, no tiene sentido.
6. Derechos de autor
No es ético ni legal en muchas veces copiar textos originales de otros autores.
A no ser que se tenga el consentimiento del autor original del texto, no se debería usar para duplicarlo en otros medios. Es considerado plagio y tiene repercusiones penales.
ResumenTítulo del ArtículoLos 6 pecados capitales del copia-pega inmobiliarioAutorCésar VillasanteDescripciónUna cosa es ahorrar tiempo y otra es duplicar contenido indiscriminadamente. Cuidado que los peligros acechan tras presionar Control V