Según estos alabarderos políticos, ahora resulta que Obama es “comunista”, se “plegó a los Castro”, “concedió las exigencias de La Habana” y un sinnúmero de sandeces más que estoy leyendo en las redes.Pero hay un detalle en el que no reparan antes de decir todas estas cagastrofadas.
En febrero de 2015, tres influyentes políticos cubanoamericanos, reconocidos por su odio visceral a la tierra que los vio nacer o a sus padres –los legisladores Ileana Ros Lethinen y Carlos Curbelo, y el senador Marco Rubio- opinaron acerca de esta política discriminatoria.
Ileana Ros Lethinen, se preguntaba, hace casi dos años, ¿cómo le vamos a decir a un haitiano que viene a las costas de la Florida que será devuelto? Solamente un grupo (de migrantes) en todo el mundo tiene ese privilegio (de residencia permanente), los cubanos“,
Rubio, Ros-Lethinen y Curbelo
“Conozco a mis colegas y están conscientes de que las dos cosas no pueden seguir: no pueden decir ´soy perseguido políticamente´ y a la misma vez pedir este privilegio”, enfatizó Ros-Lehtinen, quien calificó a la Administración Obama de tener “una actitud patética y no tiene credibilidad alguna en relaciones exteriores, y el caso de Cuba es un ejemplo”.También se expresó el congresista Carlos Curbelo, abogó hace dos años porque se modificara la ley de Ajuste Cubano, “de tal forma que sólo proteja a los cubanos que escapan de la isla por razones políticas”.
Curbelo defendió en ese momento que “en algún momento EE.UU y Cuba tendrán que modificar su política migratoria, como parte de un proceso que, en todo caso, no ocurrirá de la noche a la mañana”.
Por su parte, el senador republicano Marco Rubio, de origen cubano, ha dicho en el pasado que quienes llegan a EE.UU presuntamente por persecución política y después viajan con tanta frecuencia a Cuba, debilitan el argumento sobre la represión en la isla.
Otros que han criticado la política de “pies secos-pies mojados” son el alcalde del condado Miami-Dade, Carlos Giménez, y el alcalde de la ciudad de Miami, Tomás Regalado, ambos cubanos de nacimiento, que en más de una ocasión proclamaron que la ciudad de Miami “no tenía fondos ni recursos para asimilar a los "refugiados" cubanos.
Entonces dilectos politólogos de café con leche atrincherados en el Versailles de la Calle 8, ¿también Ileana Ros Lethinen, Carlos Curbelo y Marco Rubio, junto a Carlos Giménez y Tomás Regalado, son “comunistas, se “plegaron a los Castro, o concedieron ante las exigencias de La Habana”?
Tomado del blog La Isla Infinita de Miguel Fernández