Revista Opinión
"Valoremos un símil: un cirujano se lava las manos antes de operar. Si trabaja en un hospital privado, se lava las manos antes de operar y si trabaja en un hospital público también. Si el hospital está en una situación de pérdidas, también. Si el hospital se asocia con veinte multinacionales de la cirugía, también. Y si trabaja en un centro pequeño, el cirujano también se lava las manos antes de operar. El cirujano ha institucionalizado el principio de lavarse las manos antes de operar como una realidad que le protege de cualquier vaivén que se produzca en el mundo. Nadie logrará nunca que un cirujano no se lave las manos antes de operar. Lo que le protegerá profesionalmente será siempre esa condición. Un cirujano ejerce su profesión de acuerdo con unos parámetros que ha convertido en leyes y que no permite que la sociedad cuestione. No importa lo que le ocurra al hospital, él sabrá siempre que su trabajo se desarrolla de este modo. Y sin embargo el periodismo español no ha rescatado ninguna línea defensiva. Es más, las ha entregado creyendo que lo hacía en favor de la libertad de expresión. Ha ido entregando todas sus líneas de bandera. El periodismo nunca ha logrado decir: Perdone, pero sepan que este tipo de actividad nosotros la desarrollamos de esta manera tanto si nos compra Disney como si pertenece a la Iglesia como si pertenece a Polanco; tanto si es del Frente de Juventudes como del Comunismo Internacional".
El fin de una época", de IÑAKI GABILONDO