La Policía bloqueó los accesos al recinto
Desde la organización del Mangafest se emitió un comunicado el mismo sábado contando su versión de los hechos. Según dicen, la organización cerró las taquillas el sábado en el momento en el que se alcanzó el aforo máximo del recinto, pero mucha gente que estaba haciendo cola siguió acercándose hasta la explanada del FIBES y la puerta del Palacio de Congresos. Los organizadores han declarado que, al ver el bloqueo que se estaba dando en los puntos de acceso y salida del recinto decidió llamar a la Policía Nacional y Local de Sevilla para que solucionara el problema y pusiera orden.Tanto Policía Nacional como desde la organización se ha confirmado que en ningún momento se superó el aforo del recinto en su interior, como se ha estado diciendo por Twitter y otras redes sociales. De hecho, dentro no hubo ningún problema, todas las quejas vienen de lo sucedido fuera en la explanada. Según narra los organizadores, fue la Policía la que decidió bloquear los accesos, hasta tener controlada la situación en la explanada, no dejando entrar a nadie, aunque llevaran su entrada correspondiente. En total entre 2.000 y 3.000 personas fueron desalojadas de la explanada del FIBES, todo de "manera pacífica y sin altercados" según dijo la Policía.
La Policía Nacional ha abierto una investigación para esclarecer que pasó el sábado y que fue lo que acabó motivando el desalojo para evitar sobrepasar el aforo. Todo pudo deberse a algún problema de organización, ya que la gente, al no estar debidamente informada siguió acudiendo al FIBES a pesar de no poder entrar. Parece que el problema deriva de eso, de gente haciendo cola durante horas, a la que le dicen que no va a poder entrar, y los primeros de la cola se enteran de qué están pasando, pero conforme la cola se alarga entra en juego 'el teléfono estropeado' y al final el último se enfada, empiezan a gritar y ya la tenemos montada.
Por lo que cuenta gente que estuvo dentro del recinto del Mangafest durante esos momentos el bloqueo de los accesos hasta que se solucionara todo fue una buena decisión "porque había mucha gente demasiado enfadada queriendo entrar a toda costa sin ningún tipo de control". Pero el caos ocurrido por la falta de organización y de prevención de colas podría haberse evitado.
La explanda del FIBES se llenó de asistentes sin entrada que buscaban acceder al Mangafest
Los organizadores del Mangafest permitieron que la gente con entrada que se quedó sin poder acceder al recinto, cambiaran su entrada por una para el domingo, y desde Facua se ha avisado que pueden solicitar la devolución del dinero, tanto de la entrada como del desplazamiento hasta Sevilla, si en ningún momento acabaron accediendo al Mangafest. La propia Facua también va a investigar lo ocurrido porque cree "que hubo un caos organizativo que acabó en un perjuicio para los consumidores".
El Salón del Manga de Barcelona también tuvo problemas en su día con el aforo, colas y muchedumbres, y en esta última edición cerró la venta de aforo en la venta anticipada, para evitarse así las colas en taquillas. Este es un problema muy habitual en eventos multitudinarios. Haces cola durante horas, pero cuando se agotan las entradas y te quedas sin, hay quien se vuelve por donde ha venido y hay quien, por no enterarse se acerca a las entradas y al final la lía más que otra cosa. En estos casos lo mejor suele ser avisar con antelación el número de entradas a la venta y anunciar de manera muy clara y concisa a toda la cola, así como en la entrada del evento, que se han agotado las entradas y que no hay posibilidad de acceder al recinto. Aunque conozco casos en los que a la gente le ha dado igual. He estado haciendo cola, estando al final de lo que sería la fila que conseguiría entradas, avisar a la gente que llegaba que sólo iban a vender X entradas y que en la fila ya había gente más que suficiente, pero por el 'por si acaso' la gente se queda, y al final ese 'por si acaso' acaban siendo decenas de personas más que se quedan sin entrada y se enfadan luego por haber hecho la cola y quedarse sin entrada a pesar de haberles avisado.
Hemos tenido la suerte de que esto al final ha quedado en hecho anecdótico y se haya tenido que lamentar ningún daño físico, pero es otro aviso de que cuando se trata de eventos multitudinarios con gente joven nunca viene de más tener más de un plan de contingencia y tener en cuenta cosas como ésta. El que no haya problemas de aforo dentro del recinto no quiere decir que no los haya fuera por la gran afluencia de gente interesada en el evento, en este caso el Mangafest de Sevilla, y para cualquier cosa hay que estar preparados. Me imagino que el año que viene ya no les pillarán desprevenidos.