Los productos catalanes tienen el número 15

A los domócratas no nos gustan los boicots, ni nada que potencie la disgragación y la discordia, pero los nacionalistas catalanes, que sí practican el boicot a todo lo español desde hace décadas, quizás se merezcan una lección. Ellos odian a España y procuran demostrarlo en cada ocasión, en los estadios, en los supermercados, en los medios de prensa, en la cultura, con sus votos, con su odio mezquino. Algunos pensamos, no sé si con razón o sin ella, que la mejor manera de combatir el nacionalismo montaraz es hacerles entender y padecer los perjuicios y daños que esa actitud insolidaria y violenta causa a la propia Cataluña, una tierra que, por culpa del nacionalismo extremo, se empobrece y se aisla cada día más. --- Los nacionalistas catalanes están que no caben en su cuerpo porque han conseguido que a "partir de ahora, los productos fabricados en Cataluña tendrán un dígito propio en los códigos de barras, proporcionándoles un índice diferenciado al resto de España". En algunas webs nacionalistas pueden leerse expresiones como "Es el principio de la Indepedencia" y "Ya no somos España".

También nos alegramos los que creemos que la compra selectiva es un derecho inalienable del ciudadano y un arma defensiva frente a la agresión y el abuso de los nacionalistas.

El código de barra de los productos españoles es el 84. Al comprar, nunca mirábamos hasta ahora si el producto había sido fabricado en Andalucía, en Madrid o en Cataluña. Pero ahora, el nacionalismo nos ha facilitado la labor. Pronto, los productos catalanes quedarán claramente diferenciados porque comenzarán con el número 15, lo que facilitará el conocimeinto del origen y lo que uno debe comprar o no.

Ciudadano español: reucuerda que el código de barra español es el 84 y que el catalán es el 15.

Es importante recordar este dato para los que creemos en una España libre y culturalmente diferenciada, pero unida en lo que se refiere al destino común y a las ilusiones, proyectos y esfuerzos colectivos. Para muchos, practicar la compra selectiva es solo una manera de defendernosfrente a la agresión nacionalista catalana.

Rubén

(Texto inspirado en un documento que está circulando insistentemente por Internet y que he adaptado como colaboración en Voto en Blanco)