Gracias al mundo del manga-anime se ha popularizado el uniforme reglamentario nipón, mostrando a hermosas y sexys chicas vestidas con esta elegante vestimenta.
Esta prenda tiene su historia. Japón no puede dejar de ser bizarro. Tanto la vestimenta escolar masculina como la femenina allá tienen un origen muy curioso pero como aquí solo nos concentraremos en los uniformes de la mujeres.
Los uniformes escolares japoneses se conocen como seifuku (制服) y no todos son iguales. Existen varios tipos aunque el más tradicional es el gakuran para los hombres y el sailor fuku (セーラー服) o estilo marinero para las féminas. Pero gracias a la influencia occidental que a los adolescentes les encanta, ya muchos institutos utilizan el llamado american blazer, cuya única diferencia en el uso de un suéter de corte americano
Aunque acá en México realmente nos vale verga el uniforme, para un japonés al algo vital, casi llegando a lo absurdo, pues son muchos los estudiantes que escogen escuela basándose únicamente en el uniforme que usan. Así, las escuelas están innovando para buscar un diseño moderno y atractivo para captar estudiantes.
El uniforme escolar se instauró durante los últimos años del siglo XIX, durante la llamada Restauración de Meiji, cuando Japón decidió abrirle el culo a todo lo que oliera occidental, con el afán de salir de la edad media en la que estaba sumergida y ponerse al día. Y aunque se abolió el sistema de castas legalmente, esta nunca ha desaparecido en realidad. Fue entonces cuando las escuelas empezaron a usar un uniforme único, para darles una sensación de igualdad a todos los estudiantes.
Así es como en 1879 se establece el traje de oficial naval como el primer uniforme para los jóvenes estudiantes hombres. El saco con el cuello alto y cerrado y el pantalón recto, el cual era el uniforme para hombres, es el mismo que se continúa usando hasta ahora y vemos tanto en el anime. El uniforme para mujer no fue creado para las niñas originalmente; primero fue establecido por la Escuela de Maestras de Tokio, en 1875, actualmente la Universidad Okanomizu. Este traje, fue modificado 10 años después y siguió sufriendo variaciones.
Sin embargo, el traje de marinero como uniforme femenino, aparece hasta el año de 1921, cuando se adapta y se acepta un modelo femenino que constaba de blusa y falda, bastante feo por cierto. el cual estuvo a punto de desparecer durante la segunda guerra mundial, por ser una representación del pero ya en la post-guerra, durante la reconstrucción de Japón, nuevas leyes surgieron, como las de educación, en la que los uniformes escolares se hicieron obligatorios, siendo de diferente tipo según el grado.
Y así es como las niñas de entre 13 y 17 años lucen con gallardía este uniforme.
¡Y no es cualquier cosa! Allá los uniformes son importantísimos. El tipo de uniforme (según sea de escuela pública o privada) son un símbolo de rango social y el que una niña lo use la convierte en una “joven estudiante” que es algo que llena de orgullo a sus familias.
Una de las cosas curiosas que existen allá, en Japonlandia, es que las niñas no pueden usar las faldas de su uniforme más arriba de la rodilla ¡Que van a la escuela a estudiar, no a andar de coquetas, carajo! Pero, al salir de clases, las pubertas se suben la falda niveles ridículo, mostrando demasiado de su anatomía, cosa que escandaliza a sus mayores e impacta a los foráneos.
Acá, en occidente, las culpables directas de popularizar esta prenda fueron las Sailor Scouts, las guerreras minifalderas de anime Sailor Moon (Pretty Soldier Sailor Moon (美少女戦士セーラームーン) adaptación de un manga de Naoko Takeuchi aparecida originalmente en 1992. En esta historia, la creadora se basó en el sailor fuku para dotar a sus heroínas de uniforme, sin saber (o tal vez, sabiéndolo) creando una verdadera fascinación por las guerreras en microfaldas y de paso, que en occidente nos interesemos por cómo se vestían las escolapias del sol naciente.
De ahí en adelante, los personajes con falditas marineras abundan en todo el mundo del anime, siendo raro el que no tenga una colegiala como personaje ya sea principal o secundario; convirtiéndose de paso en todo un fetiche sexual que es ampliamente explotado el el mundo erótico y pornográfico.
Esta fue una rápida y resumida historia del origen de este uniforme, espero les haya gustado.