Los señores del Viento
¡Señores del viento escuchen mi voz!
Vuelvo a mi hogar cuan batallador,
vuelvo sin arco, espada o caballo,
vuelvo y en el pecho, el puño llorando.
¡Señores del viento, escuchen mi voz!
Escuchen el lamento de el perdedor.
Vi nacer la llama candente,
vi arder la mar,
vi en los cielos mil flechas ardientes,
y vi donde fueron a parar.
Vi un destello fugad,
¡A los señores del viento llamar!
El tiempo pasa, y como un reloj,
los corazones se aúnan y son;
las manecillas que acunan la nación.
¡Tic-tac, tic-tac y rompe el tambor!
Joven espina, caíste en el mar,
y aguamarina portas en las manos,
¡llama a la soledad de la multitud!
Vengan señores del viento a mi guerra luchar.
¡Señores del viento escuchen mi voz!
Lancen el aire, que lleve mi amor,
que marche con vosotros mi corazón,
¡marche con vosotros la sensación!
Que mi corazón no puede con mas,
ya solo lucha por su libertad,
ensancha en mi cuerpo, hasta no poder más,
y su único anhelo es ir a la mar.
¡Señores del viento escuchen mi voz!
Vuelvo a mi hogar cuan batallador,
vuelvo sin arco, espada o caballo,
vuelvo y en el pecho, el puño llorando.
¡Señores del viento, escuchen mi voz!
Escuchen el lamento de el perdedor.