Las mujeres que se encuentran casadas sufren menos abuso de pareja, abuso de sustancias o depresión post-parto en el momento del embarazo que las mujeres que se encuentran en situación de concubinato o no tiene una pareja, según un nuevo estudio ha encontrado.
Según mostró el estudio, las mujeres solteras que formaron parte del mismo que habían vivido con sus parejas durante menos de dos años tenían más probabilidades de experimentar al menos uno de los tres problemas. Sin embargo, estos problemas mostraron ser menos frecuentes cuanto más tiempo la pareja había vivido junta.
Los problemas parecieron ser más comunes entre las mujeres que se encontraban separadas o divorciadas, especialmente si la pareja se había marchado menos de 6 meses antes de que su hijo naciera.
El Dr Marcelo Urquía, epidemiólogo en el Centro de Investigación sobre la Salud Inner City en el Hospital de San Miguel, dijo que a medida que más niños nacen de padres no casados, los profesionales de la salud deben profundizar acerca de los riesgos y beneficios no solo de los casos entre padres juntos o separados, sino de los diversos tipos de relaciones, como padres casados o no.
Lo que es nuevo en este estudio es que por primera vez los investigadores observan la duración de la cohabitación sin matrimonio, y encontraron que mientras más corto es el plazo que existe de cohabitación, más propensas son las mujeres a sufrir violencia infligida por la pareja, abuso de sustancias o depresión post-parto en la época de concepción, el embarazo y el parto.
Los investigadores, además, alegan no haber encontrado ese patrón entre las mujeres casadas, las que experimentaron menos problemas psicosociales independientemente de la duración del tiempo que hacía que vivían junto a sus esposos.