Recientemente el Gobierno aprobó el decreto de flexibilización del sistema universitario español. El objetivo es implementar el sistema 3+2 sustituyendo el sistema 4+1, es decir que las universidades pueden, si lo desean o no, establecer el sistema del 3+2 o mantener el 4+1. Una chapuza, porque evidentemente no es lo mismo estudiar un grado durante 3 o 4 años. Por ello los rectores han decidido aplazar implementar la reforma hasta 2017.
Evidentemente hay dos claros errores en esta reforma, en primer lugar que la reforma no se aplique homogéneamente y en segundo lugar que ésta encarecerá los costes de estudiar en la universidad. Por ejemplo, en la Complutense un año de grado cuesta alrededor de 2000 euros, mientras que un año de máster cuesta 4000 euros. Esto sucede en prácticamente todas las universidades de España y como podéis comprobar aumentará el gasto de las familias que quieran que sus hijos obtengan una buena formación universitaria (grado y máster).
Pese a ello, la reforma de implementar el sistema 3+2 no es errónea, el error fue que al haber establecido el Plan Bolonia, se instauró el sistema 4+1, al contrario que prácticamente el resto de países de la Unión Europea. Como casi siempre, en España hacemos los deberes tarde y mal.
Por lo tanto, voy a comparar los diferentes sistemas educativos de algunos países europeos. Ninguno es perfecto, todos tienen algunas debilidades y algunas fortalezas, como siempre.
En primer lugar, comenzaré con un país que suele situarse como el ejemplo a seguir, Dinamarca. Este país tiene implementado el sistema 3+2, pero sobretodo, lo que hay que destacar de sus sistema universitario es que es completamente gratis y que además todos los estudiantes reciben becas de diferentes cuantías para llevar a cabo sus estudios y poder instalarse en la cercanía de su facultad, aunque evidentemente a cambio de unos rendimientos académicos.
Prosigamos con Holanda, en cuyo país los grados duran 3 años y los másters entre 1 y 2 años, si bien los grados cuestan alrededor de 2000€ y un máster también. Es decir que evitan el problema que tendríamos en España al implementar el sistema, ya que los másters cuestan mucho más que los grados y yo los considero necesarios para poder especializarte y obtener una formación más adecuada. Sin embargo, la mayoría de los alumnos si reciben una beca de mayor o menor cuantía.
Por otro lado tenemos el caso francés, que también implementó el sistema 3+2, aunque tiene algunos másters que duran un año. El coste del grado apenas supone el coste de unos cientos de euros por gastos administrativos y un máster puede costar más o menos 500 euros.
Por último, Alemania también tiene establecido el sistema 3+2 y al igual que en Francia, el coste de los grados apenas es unos cientos de euros por gastos administrativos y en el caso de los másters es igual, el coste está alrededor de unos 500 euros. Aunque es cierto que en Alemania, al igual que en Austria, Finlandia, Suiza y otros países, hay que destacar sus Fachhochschulen. Son universidades de Ciencias Aplicadas, que normalmente tienen grandes convenios de prácticas con empresas, pero que no pueden conceder el título de Doctor.
Las carreras en estas Fachhochschulen son más técnicas y menos teóricas, además ofrecen títulos que no se ofertan en las Universidades, como Turismo. Sin embargo, por ejemplo, ADE se oferta en ambos lugares, pero como ya explique, en las Universidades es más teórico y en las Fachhochschulen es más técnico e incluyen más prácticas en empresas, un perfil muy demandado.
Cómo imagináis este perfil de Universidad más técnica, no esta implementado en España. Por lo tanto creo que es importante que si se quiere llevar a cabo una reforma en el sistema universitario, debe ser una reforma consensuada para que no se cambia con cada Gobierno. Además creo que debería incluir la creación de Fachhochschulen y sobre todo un aumento de las becas.
Para que se me entienda, no estoy en contra de la reforma (sí lo estoy por la chapuza al no homogeneizar el sistema, por hacerlo tarde y sobretodo porque supone un mayor gasto para los estudiantes/familias), pero el sistema 3+2 no es erróneo. A largo plazo es evidente que las tasas deben descender, ya que la educación debe estar al alcance de todos, sin depender de los ingresos familiares. Si bien, a corto plazo se deberían aumentar las becas, sobretodo en el caso de los másters, para que la reforma no establezca un sistema universitario desigual.