No entendía a partir de qué momento la vida dejó de tener importancia. Los sonidos de los disparos y las explosiones de las bombas hacían eco en su corazón.
_ ¡La vida es lo más importante!_ siempre había escuchado decir ¿Pero cómo mantenerse a salvo?
Escondido debajo de un coche, unas gotas de sangre le salpican la cara. Los gritos de terror y miedo le hacen cerrar los ojos por segundos. Luego un silencio… parece que todo vuelve a la normalidad; pero siente cómo unas manos lo sacan de debajo del coche. Son sus padres que lo llevan en brazos, corriendo, tapándole la cara. ¡Apenas tiene ocho años de edad!De repente, descubre que está en el mar dentro de una pequeña barca, flotando sobre profundas y frías aguas. Tiene mucho frío, sólo está cubierto con una fina manta.Sus padres huyendo de la guerra junto a muchas personas más navegan sobre el mar hacia otro país en busca de refugio.Mas las olas… golpean una y otra vez la pequeña barca. Cierra y abre los ojos y ve el mar, cierra y abre los ojos y otra vez el mar, el mar…_ ¡Si los sueños alimentan el alma, soñaré con ir a la escuela, todas las mañanas… algún día!_ pensó, y luego se durmió.Autora: María Abreu