Nada más terminarse de formar el Planeta Tierra dicen que una Entidad, unos la llaman Demiurgo y otros el Rey del Caos, al que en las páginas del Increíble Herc lo llamaron Amatsu Mikaboshi, como parte de la Expansión del Caos, originó la vida. Las entidades que se formaron fueron las de Gea, creadora de Vida, Chthon, el Místico Oscuro, y Set, el Gran Destructor, entre otros. Chthon se convirtió en el primer maestro de las Artes Oscuras, Gea se refugió en el océano viendo como la vida tomaba forma y Set engendró un montón de criaturos medio serpientes, que iban montando el pollo por donde iban. ¿Pero que pasó? Que Set, ansiando mas poder, mató a otros Dioses menores, y las otras deidades iban haciendo lo mismo, originándose los primeros demonios, así que Gea y Demiurgo engendraron un hijo, Atum, el Dios del Sol que los Egipcios llamarían Aton, que mató y absorbió a los Demonios, convirtiéndose en Demogorge, el devorador de Dioses, e hizo frente a Chthon y a Set, y viendo que eran mas débiles que el, huyeron a otra Dimensión, donde estuvieron milenios sin interferir.
Pasaron millones de años y los Dinosaurios gobernaban la Tierra, y Set, desde otra Dimensión, los controlaba para ser feroces y masacrar todas las formas de vida. Gea también controlaba otras formas de vida, la de los mamíferos, como los ratones y algunos monetes, pero un día, 3 dinosaurios la pillaron de sorpresa, se fusionaron y zas, Set, a tope de poder volvía a estar sobre la Tierra. Gea volvió a invocar a su primer hijo, Atum, para que acabara con el, y acabó arrancándole la cabeza, la cual absorbió y volvió a convertirse en Demogorge, pero a Set le crecieron más, hasta llegar a 7. Durante miles de años combatieron, hasta que Atum atrajo un meteoro gigantesco a la Tierra para golpear a Set. La Explosión de dicho meteoro extinguió la vida de los Dinosaurios (algunos quedaron, es verdad) y Set, muy debilitado, volvió a su Dimensión, mientras Gea jugaba y triscaba por los campos con los ratones y los monetes.
Pasaron aún mas millones de años y en un descampao bastante majo, los primates que se encontraban a mitad de camino entre el mono y el hombre poblaban el Continente de Pangea, pero una variedad de primate empezó a desarrollar capacidades telepáticas. Al parecer, un miembro de esta raza le dijo a otro primate que iban a venir unos seres del Cielo que iban a darles un gran poder, pero que debían adorar a Set, y ayudarles a matar a toda su raza para que Set tuviera alimento y poder conseguir esos dones del Cielo. Los Primates que no hablaban telepáticamente se engorilaron (nunca mejor dicho) y se liaron a golpes con esos monos malvados, rebelando su aspecto real, con cabeza de Serpiente. Poco después, y para regocijo de Gea, llegaron los seres del cielo, la Primera Hueste de los Celestiales. Mientras Gammenon el Recolector tomaba a los primates normales para llevar a cabo el experimento por el cual se dieron a origen los Eternos, los Desviantes y los Humanos, Arishem, el Juez se encargó de espantar a casi todos los seres serpiente, y hacer que durante millones de años fueran capturados por los humanos.
Adelantemos el reloj hasta hace 20 mil años. La Segunda Hueste de los Celestiales volvió a la Tierra para ver que tal iba lo que habían hecho. Había 2 grandes continentes, Atlantis, donde vivían los humanos, y Lemuria, donde vivían los Desviantes, que tenían esclavizada a la mayoría de la Humanidad. Ahí, un humano, Atra, creó la Corona Serpiente, a imagen y semejanza de su Dios, Set. Y mientras los Lemurianos atacaban Atlantis, los humanos permitieron detonar erupciones volcánicas que inundaron de lava todo el territorio, alejando a los Desviantes. Ante ese ataque, Atra se presentó ante el Emperador de los Desviantes, y usó la Corona para atacarle, pero no le hizo efecto, ya que él también era servidor de Set. Los Celestiales vieron todo lo que había ocurrido y cómo se estaban aniquilando mutuamente, así que dejaron 2 regalitos, el primero, a uno de los Celestiales que se negó a que atacasen la Tierra, por lo que fue condenado a dormir eternamente, y hasta el día de hoy se le conoce como El Celestial Durmiente. Viva la imaginación. Pero el segundo regalo fue una bomba de multimegatones amasaos que petó y formó un cataclismo de 3 pares de pelotas, pero de pelotas de las gordas. Los 2 continentes se hundieron y los pocos humanos que se salvaron fue por la intervención de los Eternos, que construyeron un Arca donde guardaron animales y Humanos. Y en el fondo del océano, 2 esqueletos agarraban una Corona con forma de serpiente de 7 cabezas.
Adelantemos aún mas el reloj y viajemos a hace 12 mil años, en plena Era Hiboria (Si, la de Conan y Red Sonja), donde Toth-Amon creó la Corona Cobra, que utilizó para controlar a la gente y coronarse Soberano de Estigia y de Zingara, pero en eso que apareció Conan y enfrentándose a él, le derrotó. La Corona Cobra perdió sus poderes y aunque pasaron las décadas, Conan y Toth-Amon se siguieron enfrentando, siendo éste último ayudado por los últimos Hombres Serpiente.Terminó esa era y comenzó la del Antiguo Egipto, donde apareció el Panteón Egipcio que conocemos, y un joven Dios de la Muerte se apareció como Una Serpiente Gigante, que tomaba forma humana, y se hacia llamar Seth, pero no era la deidad Arcana, sino que utilizó su nombre y a sus servidores.
Hablando de Dioses, en este caso Olímpicos, hace 2000 años, un Atlante llamado Ossem le fue con el chisme a Poseidón (o Neptuno, si sois mas de Mitología Romana) de que volvía a haber adoradores de Set, en este caso sin H. Lo mas heavy es que el líder de esa secta era su propio hijo, Balaal, que al enterarse que se había chivado, lo capturó y lo intentó sacrificar al propio Set en un Altar con forma de Serpiente de 7 cabezas, que también funcionaba como portal dimensional a la Tierra. Pero en ese momento apareció Poseidón, tridente en mano y se cargó el Altar, a Balaal, a los servidores y a todo quisqui salvo a Ossem. Hasta dejó un monstruo marino enorme ahí para que nadie volviera a intentar hacer nada parecido, y cuando Ossem se estaba muriendo, se le apareció y le dijo que estuviera tranquilo, que habitaría con los Atlantes y que sería uno mas de ellos, y no les pasaría nada. Dicho esto, Ossem sonrió y murió. Pero el que no tenía ganas de sonreír era Set, que decidió que si no podía usar el Altar de Oro o la Corona Cobra, su poder estaría dentro de la Corona Serpiente.
Hará unos 600 años, un atlante encontró dicha corona, que aun la sujetaban la mano de dos esqueletos, uno humano y otro desviante, y al tocarla se murió. Su emperador, Naga, vio lo que ocurrió, y al tocarla y no morir, decidió ponérsela, y se convirtió en el Heraldo de Set. Durante siglos gobernó Atlantis, afirmando ser Hijo de Set, tomando cada vez más aspecto de reptil y haciendo atrocidades que harían que cualquier político actual se llevase las manos a la cabeza. Repelía cualquier rebelión, pero hubo una raza de atlantes telépatas que pudieron hacerle frente, y una noche, mientras dormía, le robaron la corona. Huyeron hacia la Antártida, donde se asentaron, y elaboraron una “poción” que les permitió volverse respiradores de aire y tener la piel como un humano de raza caucásica. También encontraron maquinaria anterior al cataclismo provocado por los Celestiales, y la usaron para generar calor y luz en la zona, y de paso, modificaron el aspecto de la corona, para que no fuera fácil reconocerla. Los 2 miembros más importantes de esa raza fueron Pyscatos y Bekkit. El segundo dedicó su vida a viajar por el mundo, y el primero se quedó al mando, pero al volver Bekkit a la Antártida, vio como Pyscatos y sus hombres tenían aspecto de reptil, y su amigo ahora llevaba puesta la Corona Serpiente. Su mente había sido corrompida por el poder de Set, y acabó matando a Bekkit. Pero sacando fuerzas de la nada, se quitó la corona, se clavó un puñal en el pecho e inició la secuencia de Autodestrucción de la Base.
Ahora, viajemos al futuro, hasta los años 20. Un político demagogo que soltaba unas burradas como pianos, llamado Paul Destine, servidor de Set, se presentó a Presidente de los USA. De joven era un telépata sencillo, y aficionado a la espeleología, el senderismo y el macramé, por lo que no dudó en irse a hacer el zascandil hasta el polo Sur en compañía de su amigo Leonard Mckenzie a ver si veía a Pingu o al Oso polar de la Coca Cola. En su lugar encontró cierta Corona, pero hubo un derrumbamiento. Mckenzie consiguió escapar, pero Destine no. Así que se puso la Corona y quedó durante años en hibernación, mientras Set le comía el tarro, y al despertar, a lo primero que fue es a destruir Atlantis, por orden de su señor Serpiente. Lo que pasa es que Mckenzie tuvo un hijo, Namor, que al ver la que había liado, intentó hacerle frente, pero usó su poder para borrarle la mente, y Namor tuvo que andar durante años por Nueva York como un vagabundo, sin recordar quien era, hasta que Johnny Storm, el de los 4F, le encontró, y recuperó sus recuerdos.
Habiendo pasado el tiempo, Destine dejó el océano y usando sus poderes intentó manipular a toda la población americana para que le votaran como Presidente, y en ese momento apareció Namor, que le hizo frente, pero volvió a ser derrotado. Aunque ahora viene lo Heavy. El amigo Destine estaba tan sobrado que pensaba que aún sin Corona tendría poderes, por lo que se la quitó y se tiró de una azotea, y obviamente se metió tal leñazo que se fue de cabeza al Corral de los Quietos. ¿Y que fue de Naga? No murió, envejeció pero seguía vivo, y al enterarse de lo de los últimos portadores de la Corona, mandó a buscarla, pero la tenía Namor en su poder, y aunque la Cosa intentó quitársela para que no le diera un mal uso, al final la acabó llevando a Atlantis, pero volvió a tomar su auténtico aspecto y quien la tocaba acababa siendo poseído, incluso la mujer de Namor, Lady Dorma, y el propio Namor, y tras un enfrentamiento con un sicario Lemuriano llamado Karthon (os juro que es cierto, buscadlo en google), consiguieron devolverle la corona a Naga, y este seguía igual de viejo y de tarao, pero recuperó sus poderes.
No tardó en volver a aparecer Namor para intentar derrotar a Naga, y aunque le engañó para hacerle creer que su esposa Dorma había muerto, le hizo enfrentarse a varios monstruos y poco después al propio Naga, pero Naga no murió a manos de Namor, sino del propio Karthon, ya que Naga usó a su hermana para que tomara la forma de Lady Dorma. Sin embargo, gran parte de los planes de Naga eran aconsejados por la suma Sacerdotisa de Set, Llyra, a quien en breve conoceremos.
Si os parecía poco lío, cambiemos de Universo, mas concretamente el del Escuadrón Supremo, donde un grupo de Jerifaltes de Negocios controlaban el mundo, y además servían a Set, entre ellos Kyle Richmond, alias Halcón nocturno, Justin Hammer, Obediah Stane y el propio Presidente de los Usa, que no dudaban en usar la Corona Serpiente de su mundo para llevar a cabo sus planes, y de paso, comerle el coco al mundo mediante discursos televisados y productos comerciales. Como el Sálvame pero con serpientes. Pero que casualidad, que hubo un crossover hace años en el que los Vengadores del Universo 616, el de Continuidad habitual, se fueron a ese Universo, y entre la Visión y la Bruja Escarlata le quitaron la Corona Serpiente a los malotes y desmantelaron la Secta de Set.
Volviendo al Universo 616, un día, la Bruja Escarlata, la Cosa y Mantarraya, un Vengador con armadura que era oceanógrafo y que como su propio nombre indica, era un Manta y un rayao, vieron una imagen de Set en el Capitolio de Washington D.C. Al entrar, vieron al presidente de la Petrolera Roxxon, Hugh Jones, con la corona Serpiente puesta, y explicando que era la combinación de la de esta Tierra y la que trajeron de la Tierra del Escuadrón Supremo, ya que la Visión, al volver a la Tierra de Origen la tiró a la Fosa de las Marianas, pero con la ayuda del Láser Viviente, Jones la encontró. Tras usar un ejército de copias de los anteriores portadores de la Corona, Jones envió a la Bruja Escarlata al Reino de Set, donde por poco muere, pero la Cosa le quitó la Corona a Jones y la recubrió con piedra arrancada del suelo, para intentar que nadie mas volviera a usarla, y la llevó al Proyecto Pegaso.
Y menuda cagada fue enviarla allí, ya que al quitarle el recubrimiento de piedra, la corona “poseyó” a un técnico, y utilizando la tecnología del Proyecto, reunieron todas las coronas serpiente de todos los mundos posibles y las fusionaron en una gigante. De hecho todos los técnicos del Proyecto llevaban una puesta, incluso el propio Quasar, que andaba por ahí el hombre, y hasta secuestraron al Doctor Extraño. En ese momento, hicieron aparición la Bruja Escarlata, la Cosa, y sorprendentemente, Spiderman. La Corona Gigante empezó a moverse y tomo vida, “comiéndose” a los recién llegados y al Cubo Cósmico, que era lo que daba energía a los transportadores, y estaba a punto de devorar también al Doctor Extraño, pero dentro de la Corona gigante, la voluntad de los 3 héroes unida al poder cósmico del cubo hicieron que explotase, y el Doctor Extraño lanzó un hechizo que, en teoría, evitaría cualquier contacto de Set sobre esta Tierra, pero lamentablemente, el Doctor Extraño estaba debilitado y no funcionó correctamente, motivo por el cual ocurre esta saga.
Desviantes, Lemurianos, Atlantes, Sirénidos y otros criaturos pseudos reptiles que ni Frank de la Jungla se atrevería a tocar unirán sus fuerzas para volver a atraer a su Dios, el maldito Set, y sus actos repercutirán en todo el Universo Marvel.
La historia que os acabo de contar es el Origen de Set, de sus seguidores y de la Corona Serpiente, que podréis encontrar en la saga completa de Atlantis Ataca, editada en España hace años. Para facilitaros la búsqueda de los números en cuestión, os paso el siguiente Checklist. Os digo lo mismo que con la Guerra de la Evolución, todos los cómics son de Forum y tendréis que comprarlos en tiendas especializadas, y son los siguientes: Marvel Héroes Especial Invierno 1989, Patrulla X Especial Invierno 1989, Spiderman Especial Invierno 1989, El Castigador 22, Spiderman 196 y 197, Daredevil 5, Los Vengadores Especial Invierno 1989, Factor X Especial Invierno 1989, Los Nuevos Vengadores 36, Marvel Two in One Capitán América y Thor 59 y los 4F Vol. 1 86.
Continuará…
Puzzle Bobble
Karate Blazers
Puzzle De Bloques
Magical Cat Adventure