Me ha costado darles la gracia pero mañana finalmente se cumplen 100 días de la toma de posesión del presidente catalán, Artur Mas, mientras que el pasado viernes cumplió el mismo período en el cargo Juan Rosell, presidente de los patronos españoles.
Es costumbre esperar hasta superar esta fecha para ejercer una primera valoración de los gobernantes. Y en eso estamos.
Vayamos por partes. Un primer balance del gobierno de los mejores ¿? En Cataluña, como se autoproclamaron.
No lo son. Eso está claro. Muchos fueron los que se negaron a ser consejeros. En contadas ocasiones Mas pudo escoger al primero de la lista. En algunos casos tuvo que recurrir a escoger al quinto/a. Al final muchos altos cargos han recaido en miembros de CiU. Queda claro que esa sociedad civil, en estos momentos, no se ha querido involucrar en la gestión.
Su promesa más aireada en campaña electoral, suprimir inmediatamente el impuesto de Sucesiones (no el de Donaciones), no se ha cumplido. Ahora dice que se hará de manera progresiva. Ya veremos.
En el trasfondo de esa decisión, los apoyos que necesita de la oposición para aprobar los presupuestos de 2011. A pesar que el PP le brinda su apoyo en el tema, Mas prefiere contar con el PSC y éste le exige el mantenimiento temporal del Impuesto de Sucesiones.
Un tema que merece la crítica se centra en torno a algunos CV, como el de su vicepresidenta, que no eran correctos. En otro país hubiera sido motivo de renuncia o cese. Pero aquí tenemos otro rasero y no pasa nada.
Otra de las promesas electorales, reducir las listas de espera en Sanidad, no se cumple. Se elimina el derecho a ser operado/a en, como máximo, seis meses, y se paraliza la aplicación de la Ley de Dependencia.
Cuando CiU estaba en la oposición criticó duramente los ‘bonos patrióticos’, sin embargo, ante la falta de otras alternativas, el ‘conseller’ de Economía, Mas-Colell, ha decidido una nueva emisión recurriendo al mismo sistema.
En suma, más oscuros que claros en un primer balance de gestión donde las próximas elecciones municipales marcan en parte la agenda de CiU se juega la alcaldía de Barcelona, están postergando duras decisiones que afectarán a los ciudadanos.
Al contrario de lo acaecido con Juan Rosell que, en su aterrizaje en la CEOE, ha empezado a gestionar con presteza los temas pendientes.
Algunas decisiones son de carácter interno, como la reforma y adelgazamiento de la estructura de la organización, o el fortalecimiento de la unidad, después de unas duras elecciones.
Otras, externas, como la reforma laboral pendiente, donde se ha conseguido un rápido acuerdo con los sindicatos en el tema de la negociación colectiva.
Rosell es de la opinión que la situación económica es tan crítica que hay que hacer cosas. “Si te equivocas rectificas pero lo peor es no hacer nada”.
En este caso, el listón se ha situado bien alto. La pregunta es si será capaz de mantener el nivel el resto del mandato.
Revista Economía
Luces y sombras. Los 100 días de Artur Mas y Juan Rosell
Publicado el 05 abril 2011 por Quim @Quim_MarquesSus últimos artículos
-
¿cómo conseguir 5.000 millones de euros sin lastimar el estado del bienestar en españa?
-
PROFESIONES (CASI) DESCONOCIDAS, CON GRAN FUTUROLa escuel...
-
Alex Cruz, nuevo presidente de British Aiways
-
La Universitat de Barcelona planea edificar un inmueble de cinco pisos al lado del Palacio Real de Pedralbes