Lucha de poder (USA, 1956)

 

Título original: Showdown at Abilene

Director: Charles Haas

Guion: Berne Giler, Clarence Upson Young

Fotografía: Irving Glassberg

Género: Western

Reparto: Jock Mahoney, Martha Hyer, Lyle Bettger, David Janssen. Grant Williams. Ted de Corsia. Harry Harvey. Dayton Lummis. Richard H. Cutting. Robert G. Anderson. John Maxwell. Lane Bradford, Eric Alden. Jean Andren. Frank Chase. Billy Dix. Harold Goodwin. Frank Hagney . Anthony Jochim, KennethMacDonald, Monte Montague. Pauline Moore. Cynthia Patrick, Alex Sharp 

Argumento

Un veterano sudista llega a su pueblo natal tras la contienda y se pone al servicio del jerifalte del lugar, un hombre ambicioso que ha hecho fortuna por medios poco lícitos.
El veterano se pone a sus órdenes porque en la guerra, por error, mató de un disparo al hermano del mandamás.
Como quiera que la situación entre los ganaderos y los granjeros es insostenible, el muchacho acepta el puesto de sheriff, pero por lo que hizo en la guerra, y nadie sabe, se ve incapaz de llevar un revólver.
Tratará de llevar la paz en la región a base de buenas palabras y puñetazos, pero el antiguo sheriff del lugar tiene sus propios planes.

"- ¿Quieres que haga algo cuando él te mate?
-Sí, no dejes que me quite las botas".
Mediocre western que significó el genuino pues la ví antes que su remake, de mayor altura cinematográfica (aunque tampoco demasiado) "Justicia en Abilene", que se rodó tan sólo once años después, hecho verdaderamente insólito por la premura, amén de que no creo mereciera el esfuerzo dada la endeblez del fim que nos ocupa.
Y es que se trata de un western modesto, tanto en el aspecto "industrial", como en ideas.
Tiene alguna buena ídem, pero las chafa la blanda dirección de Charles Haas amén de poseer falta de imaginación en la puesta de escena (si quitamos el momento en la que el protagonista habla con su antigua amada mientras se ve el rostro del prometido de ésta en un espejo).
Pero lo peor es el ritmo, lento y sin tempo cinematográfico adecuado a la historia que se narra.
Una cinta de serie B en todas sus acepciones, que no aburre, eso es verdad, pero sí que permite que el tedio asome en alguna ocasión.
Lo dicho, me gustó más el remake, y eso que tampoco era nada del otro jueves y además era una mera copia, con repetición de escenas y hasta enteros diálogos.
Como curiosidad, trabaja el recordado y añorado David Janssen, poco después mítico "El fugitivo" televisivo.