Luna llena en el lago plateado…

Hoy es luna llena, el gato estaba emocionado, como cada noche de luna que llegaba. Se sentía solo y, sin embargo, acompañado! Subió con un ágil salto a este tejado suyo que le acogía cuando soñaba, despierto…

Y la vió a ella, la magestuosa luna dorada que en una noche fría como esta le iluminaba! E iluminaba su Alma gatuna, porque ella allí estaba! Y cerró sus ojos para verla reflejada en ese lago plateado y lejano, donde ella en realidad estaba…

Y vio el sendero sinuoso por el bosque encantado, por donde ella con sus niñas paseaba! Y, aún siendo un gato, se sintió formar parte de ese antaño frondoso bosque, hoy denudo de hojas que, como un tapiz multicolor, hoy adornan sus pasos…

Y se sintió pleno, aún con la posibilidad de no llegar nunca a conocer ese camino de hermosas hojas ocres y doradas. Y la sintió como siempre muy adentro, allí donde el otoño nunca llega, donde no existe el tiempo ni la distancia…

Y se sintió enamorado, acompañado en esa soledad que a ratos duele, pero según como entusiasma por el amor que entraña! Y vio reflejado el rostro de su amada, allá donde nace en arcoiris, allí donde está ahora mismo su Alma, en la de ella!

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