Luna llena… y escondida

Hoy llega una nueva luna llena a mi vida! No es como tantas otras. Quizás es la primera de mi vida que brillará desde mi corazón de gato enamorado! Ya sabes que a los gatos nos gusta mucho la luna que ilumina la noche, pero también nos gusta sentir que la luna se alegra de que estemos allí, admirándola y sintiéndonos plenos con ella. Pero a veces la luna no llega, la esperamos y esperamos durante mucho tiempo, seguramente tanto como ella deseaba desde siempre encontrarnos esperándola a ella desde el tejado…

Pero hay lunas y lunas en nuestra vida! Algunas de ellas iluminan nuestro camino en la oscuridad de la noche; mientras que otras, se reflejan en nuestros ojos brillantes, como si fuéramos su espejo fiel y sincero, por amor! Cuando a los gatos se nos ponen los ojos brillantes es el signo inconfundible de que hay amor en ellos, porque para ello es necesario llevar la luna en nuestro corazón! Y eso solo pasa cuando el amor es verdadero!

Y a la luna le gusta sentirse dentro de nuestro corazón, aunque a veces juegue al escondite con nosotros tras una nube, una densa bruma o la niebla de invierno. Ella se siente segura y confortable dentro de nuestro corazón y sabe que la nube, la bruma y la niebla no durarán para siempre y sí, en cambio, nuestro amor. Y desde él, la luna brilla y refleja su luz… y es cuando a nosotros los gatos se nos nota en la mirada cuando sentimos verdadero amor!

Y hoy, en esta gélida y larga noche de invierno, mi luna amada brillará más que el sol, aunque quizás juegue al escondite conmigo, sin mostrarse con toda su discreta magestuosidad. Porque se siente amada, casi tanto como yo! Pero esta noche mágica, cuando alce mi vista gatuna y la vea radiante en el firmamento, desearé que sea capaz de sentirse aún más amada y para siempre, aunque sea por un simple gato como yo. Esté o no con ella, desearé que pueda sentir en sus manos el brillo y la suavidad de mi pelo negro y brillante, que pueda presentir mi mirada iluminada por su amor, que vea la discreta silueta de mi cuerpo esbelto caminando sigiloso por encima de los tejados, buscando el simple reflejo de su amor, siempre silencioso pero profundo…

Y en esta noché mágica de luna llena, sentirá mi amor como lo sentiré yo, disfrutará del silencio compartido, como lo haré yo! Y, como cada noche, sentirá que estoy escondido pero alerta en su corazón, jugando al escondite como ella juega conmigo tras esa nube, esa bruma o esa niebla que le distraen, pero que no pueden evitar que nos sintamos ambos siempre muy cerca y amados, aunque ahora solo presintamos nuestra sonrisa de complicidad y de felicidad! Porque quizás ha llegado ya el día en que nuestro amor no necesite más palabras, ni gestos, para que brille en nuestra mútua mirada, desde el corazón!

Amada luna llena, en esta noche fría como tantas otras no romperé tu silencio. Solo te pediré que escuches tu corazón y sientas la calidez de mi amor dentro de él, amándote de verdad, como cada noche y cada día, desde que te conocí. No hace falta que hoy me busques en mi tejado, pues si cierras tus ojos sentirás que ya estoy abrazado a tu propio corazón! Brilla luna de mi Alma, brilla con todo tu esplendor… y verás tu brillo y tu amor reflejados en mis ojos de gato y, aunque en silencio, como siempre te hablarán de paz y de amor verdadero, desde tu propio corazón… y hasta que salga de nuevo el sol!

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