Hoy se avista una brillante luna menguante pero el porche permanece vacío... Menguante y vacío como la memoria, los recuerdos y la vida de Carmen, que poco a poco y a pesar de los esfuerzos de su nieta, se van apagando.
Revista Psicología
Un rayo de sol entra por los agujeritos de la persiana de Luna, ya es de día, pero ella apenas ha podido pegar ojo. Ha sido una noche complicada, llena de sobresaltos… “menos mal que es sábado” – piensa Luna.La enfermedad de Carmen avanza, y eso se hace notar en su estado de alerta y en el sueño y descanso de la familia.-Buenos días abuela- dice Luna con una sonrisa medio forzada.-Carmen se gira y responde… “días…”. Y sigue mirando hacia el infinito.Luna coge a su gato TAU y le pone encima de sus faldas. Carmen pega un pequeño respingo como si despertara. Dirige su mirada a Tau y comienza a acariciarle y a decirle cosas.Luna ya tiene 12 años y conoce muy bien la situación. Sus padres se han encargado de que sepa todos los secretos de la enfermedad de su abuela, el Alzheimer. Ella ha sido partícipe de cada etapa, y está tomando conciencia de que las cosas están cambiando, y que esa maldita enfermedad está comenzando a comer terreno.No obstante Luna no desiste. Se niega a aceptar que su abuela pase las horas “dormida” así que se propone hacer lo que esté en su mano para mantenerla despierta el mayor tiempo posible. TAU es ahora con quien más interactúa Carmen, así que aprovechando que es un gato muy muy cariñoso, siempre que puede se le pone encima. -Gatito bonito… mira que pelo más suave… qué cariñoso que eres…- Dice Carmen mientras no le quita la mirada de encima.
Hoy se avista una brillante luna menguante pero el porche permanece vacío... Menguante y vacío como la memoria, los recuerdos y la vida de Carmen, que poco a poco y a pesar de los esfuerzos de su nieta, se van apagando.
Hoy se avista una brillante luna menguante pero el porche permanece vacío... Menguante y vacío como la memoria, los recuerdos y la vida de Carmen, que poco a poco y a pesar de los esfuerzos de su nieta, se van apagando.