Revista Cine
Título original: Rumah Dara
Año: 2009
Duración: 95 min.
País: Indonesia
Director: Kimo Stamboel, Timo Tjahjanto
Guión: Kimo Stamboel, Timo Tjahjanto
Música: Yudhi Arfani, Zeke Khaseli
Fotografía: Roni Arnold
Reparto: Ario Bayu, Shareefa Daanish, Julie Estelle, Ruly Lubis, Daniel Mananta, Mike Muliadro, Arifin Putra, Dendy Subangil, Imelda Therinne, Sigi Wimala
El terror MÁS salvaje.
Hay veces que las películas tienen una meta muy clara, estamos ante una de esas ocasiones. Y es que los directores propusieron mostrarnos el terror más brutal, mas escabroso y más salvaje que hayamos visto y sin lugar a dudas lo logran.
Adjie y Astrid junto a sus amigos se dirigen hacia Yakarta cuando en mitad de una lluviosa noche se cruzan con la joven Maya. Aturdida tras haber sufrido un accidente, el grupo la recoge y la acompaña hasta su casa. Muy agradecidos por haberla traído sana y salva, la familia de la joven acoge al grupo y les invita a pasar la lluviosa noche. Tras el cierre de las puertas la terrible verdad es revelada y la sangre empezará a correr. Pues las apariencias engañan y la afable familia resulta ser un grupo de despiadados psicópatas.
Kimo Stamboel y Timo Tjahjanto, más conocidos como los Mo Brothers unen fuerzas para presentarnos su primer largometraje, Macabre, el cual está basado en un corto que dos años antes habían presentado con el nombre de Dara. Y como su título bien indica no dejará indiferente a nadie. Pura poesía del terror y lo extremo. El guión de esta maravilla del horror y el gore también corre por la cuenta del peligroso dúo. Aunque si hablamos del guión hablamos de lo peor del film, ya que deja muchas cosas sin explicación y con varios giros inverosímiles y realmente innecesarios, eso sí, todo en pos del disfrute de la sangre. Parece que la pareja lo que buscaba era impactar expresándose en el apartado visual, ahí se crecen y nos muestran imágenes realmente explicitas y brutales. Con un repertorio más extenso y brutal que la saga Saw, por momentos Macabre nos recuerda al trió francés (Martyrs, Frontier(s), À L’intérieur) debido a sus escenas realmente duras. Así que pese a contar con un guión realmente flojo se le perdona por el espectacular ritmo y orgia sangrienta que nos brindan.
Los puntos más fuertes de este film sin duda son sus magníficos efectos visuales obra de Alexey Petryaev y en el apartado de CG Josaphat Soekahar y sin lugar a dudas la oscura y viciosa fotografía de Roni Arnold, la cual nos recuerda a películas como la mítica La Matanza de Texas. Todo esto converge y se convierte en uno de los films más brutales y terroríficos de los últimos años.
En definitiva, estamos ante un film para no tomar muy en serio en cuanto a su argumento, sino más de uno acabará realmente decepcionado, pero si lo que buscamos es algo realmente tenebroso, sangriento y en resumen macabro, sin duda con esta cinta vas a tenerlo, y en grandes dosis.
Firmas: Omar Parra.