Y llegó septiembre nomas,a mi se me hace que ayer festejamos navidad y ya pasamos la mitad del año.
Y aunque me dio pena alejarla de sus compañeras,le tocaba independizarse y crecer.
La maceta del ají,que supo tener su época de gloria,recibió una lavada de cara para alojar ahora a la pequeña y mimada suculenta.
Como me fue imposible sacarle la puntilla del borde y los restos de pegamento,no me quedó otra que dejarlos y disimular el frente con enduído y stencil.
Unas de esas técnicas que te sacan de un apuro, aunque a mi no me corría nadie, solo la necesidad de crecer de la pobre suculenta(y la triste situación del ají que te la cuento otro día)
(Foto patética en la mesada,con la cafetera de fondo)
Una vez seco el enduído(unos 30 minutos si la ponés en el sol) base blanca a toda la maceta.
Como esta plantita es la preferida de ambos (marido y mía) le di la opción a el de elegir los colores,dijo verde y amarillo.
Y yo acaté; aunque conociéndolo no creo que pensara en este verde ni en este amarillito.
Pero es verde y amarillo al fin.
Ahora a esperar que la Haworthia se afiance a su nueva maceta y siga creciendo.
El ají cedió su maceta,y él recibió un nuevo y merecido contenedor.Pero ese te lo muestro la semana que viene.
Acá posa junto a la maceta jaula que nos enseñó a hacer Ivana hace unos Findes Frugales y yo me encargué de imitar.
Como para que se reafirme lo inspiradora que es esta fiesta que organiza Marce cada viernes
"Sembrar un jardín es creer en el mañana"
Hasta la próxima!
Gracias por pasar!