SYDNEY (AP) – ¿Fue un desliz freudiano por parte del presidente francés Emmanuel Macron? ¿Una broma vinculada a la gastronomía francesa? ¿O incluso, una semana después de su visita a Washington, una parodia de los infames comentarios del presidente Donald Trump sobre la esposa de Macron?
En cualquier caso, Macron levantó las cejas en Sydney el miércoles llamando a la esposa del primer ministro australiano Malcolm Turnbull “deliciosa”.
Al concluir una conferencia de prensa conjunta durante su breve visita a Australia, Macron dio las gracias a los Turnbull por su hospitalidad.
“Quiero agradecerles por su bienvenida, gracias a su deliciosa esposa por su cálida bienvenida”, dijo.
El comentario provocó rápidamente una reacción alegre en las redes sociales y en la prensa australiana en medio de una conjetura animada sobre la intención del líder francés.
“Macron acaba de decir que quería agradecer a Malcolm Turnbull y su ‘deliciosa esposa’. Puedes sacar al hombre de Francia pero …”, tuiteó Alice Workman, una periodista.
Australian ABC News tuiteó: “Perdido en la traducción: Emmanuel Macron agradece a la ‘deliciosa esposa’ del primer ministro”.
A pesar de la entrega inexpresiva de Macron, algunos observadores sintieron que pudo haber estado bromeando. Turnbull acababa de mencionar el inminente almuerzo de Macron con miembros de la comunidad francesa de Sidney, y lo siguió con comentarios sobre la gastronomía y el vino franceses.
Perdidas generalizaciones sobre la obsesión francesa por la comida, Macron minutos antes también había estado hablando de camarón, retomando el comentario de Turnbull sobre la creciente influencia de China en el Pacífico Sur, cuando el líder australiano dijo que “los peces grandes no pueden comer pequeños peces, y poco los peces no pueden comer camarones “.
Otros sintieron que Macron simplemente se ha deslizado en su uso del inglés, ya que la palabra francesa para delicious – delicieux – también se traduce como “delicioso”.
Los más traviesos pueden haber considerado el comentario de Macron como una referencia burlona a la visita de Trump a París el año pasado, cuando fue sorprendido contándole a la esposa de Macron, Brigitte, que estaba “en tan buena forma” antes de mirar hacia atrás. su marido y diciendo: “Hermoso”.
En cualquier caso, el momento llegó a los titulares en Australia como un final algo cómico a una seria conferencia de prensa centrada en las protestas violentas del Primero de Mayo en París, el acuerdo nuclear de Irán y la creciente influencia de China.
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