Revista Cultura y Ocio
Para los que procedemos del ámbito de las humanidades la física y la química nos quedan demasiado lejanas pero también deberían formar parte de la cultura más imprescindible. Me recuerda mi amiga Paqui -profesora de Química-, que este año es el Año Internacional de la Química y la película de Mervin LeRoy de 1943 Madame Curie sobre la vida de esta gran científica polaca. Es una película clásica con un guión muy efectivo que consigue hacernos interesar por los experimentos científicos que llevó a cabo esta mujer obstinada en compañía de su marido. En esta época en la que se habla de recortes presupuestarios a la investigación, la película muestra el esfuerzo titánico que tuvo que llevar a cabo esta mujer para aislar el polonio y el radio, que después han sido fundamentales para muchos ámbitos de las aplicaciones científicas y de los que se ha beneficiado la sociedad. La película se construye fundamentalmente sobre una magnífica dirección de actores y dosificando en el guién los aspectos humanos con una didáctica básica sobre la experimentación científica que llevó a cabo esta extraordinaria mujer, primero en compañía de su marido y después en solitario. Primero el novel de Física y después el de Química, supueron el reconocimiento a una vida de sacrificios y lucha por hacer avanzar los conocimientos científicos. LeRoy consigue que los profanos en la materia nos adentremos en un mundo del que tenemos tanto que aprender.