Reconozco públicamente que siento una envidia enorme, cuando veo a una madre que va perfectamente arreglada. Esas madres que van perfectamente peinadas ( no se mueve ni un pelo de su sitio), parece que van maquilladas por un profesional, siempre van impecables vestidas, combinadas y arregladas con sus complementos, y capaces de correr con tacones. Y pasan las horas, y siguen perfectamente arregladas, da igual que sea primera hora de la mañana, a media mañana, que última hora de la tarde. Y siempre me preguntó lo mismo ¿A que hora se levantarán por la mañana?
¿ Cual será su secreto? Ya que cuando he preguntado a alguna madre, casi siempre la respuesta es la misma, tipo "Nada, tu que me miras con buenos ojos, ni me he mirado en el espejo". "Me he puesto lo primero que he pillado en el armario" " Pues hoy no me he maquillado..." " Nada hija Genética" ( y piensas donde estaba yo cuando repartieron eso...) Y no es que dude de la palabra de una madre...pero como me cuesta a veces creer a alguna..
Porque yo lo intento, y me propongo ir arreglada, pero al final siempre me falla algo. Os contaré que a los pocos días de reincorporarme al trabajo tras la baja de maternidad de mi segundo hijo, iba yo toda estupenda ( o eso creía yo), con un vestido granate de tirantes, (era verano) me había recogido el pelo y me había puesto un collar que combinaba perfectamente, e incluso llevaba puestos hasta los pendientes.
Pero cual fue mi sorpresa al llegar a la guardería para dejar a los dos peques, me dí cuenta (gracias a las miradas de otra madres) que llevaba puestas las zapatillas... Sí, has leído bien, se me había olvidado quitarme las zapatillas de estar en casa, esas que son tan cómodas y que con su color magenta son tan poco discretas.
En ese momento creo que mi cuerpo se empezó a encoger, de verdad que notaba como cada vez me hacía más pequeñita para poder salir de una forma discreta de la guardería.
No me ha vuelto a suceder nada parecido, desde entonces siempre miro mis pies antes de salir de casa.
Lo habitual, es que se me olvide ponerme los pendientes, el collar, e incluso que salga sin peinarme de casa.... y tu, ¿ Has tenido algún despiste a la hora de salir de casa?