Madres blogueras

Madres blogueras: así llaman a cualquier mujer y madre que tiene un blog. Cuando comencé con toda esta locura de escribir las madres blogueras eran aquellas mujeres, por añadidura madres, que tenían un espacio donde hablaban de temas relacionados con la maternidad y la crianza. Hoy si tienes un blog, sea de la temática que sea, y eres madre, automáticamente entras en la manida categoría de madre bloguera. 
Pero, ¿qué son las madres blogueras? ¿Un grupo, un movimiento, un lobby, una secta? ¿Tú eres una madre bloguera?, ¿yo soy una madre bloguera?, ¿me consideráis una madre bloguera? 
Quizá hace un par de años sí me consideraba una madre bloguera, una mamá que escribía acerca de su maternidad sin más. Hoy creo que la definición ha cambiado. Quizá porque quienes quieren crear ese grupo son personas o colectivos ajenos a La Tribu, con una clara intención de sacar su particular provecho de toda esta masa de mujeres que se mueven por la red. 
¿Cómo rentabilizar tu blog?, ¿cómo hacer un blog competitivo?, ¿cómo conseguir visitas?, ¿cómo hacer que las marcas llamen a tu puerta? Todas estas preguntas circulan por ahí esperando a ser leídas por las protagonistas que no son otras que las blogueras. Os confieso que no me gustan esas preguntas. Y no es que vaya yo de purista, ni mucho menos. Si he podido ganar un dinerillo con el blog, lo he hecho, ¡claro que sí! Pero si he de contestar a la pregunta de ¿por qué escribes un blog?, tras pararme a pensar sobre ello he de decir que lo escribo porque me encanta. Si decido escribir sobre un tema que me preocupa, o sobre alguna experiencia vivida, o sobre la última picia de Rayo, el plasmarlo en el post me sirve para reflexionar sobre ello, para sacar más y mejores conclusiones. Me encanta escribir lo que me pasa, me gusta reflejar lo que siento, me divierte contar cómo crece Rayo. 
Hace unos meses pensé que esto tocaba ya a su fin, creí que el blog había cumplido su misión y llegaba la hora de echar el cierre. Pero me sigo divirtiendo, me sigue gustando tener mi propio espacio donde contar mis cosas, me encanta tener este pequeño diario y no pensar en quién lo lee. Y me apasiona releer post de hace unos años y buscarme en ellos. 
¿Soy una madre bloguera? No lo sé y poco me importa. Lo que sí soy es una madre que se divierte escribiendo y a día de hoy, es lo único que me apetece.