¿Os sentís fatigados a menudo? ¿Cansados sin causa aparente? ¿Habéis sufrido algún calambre muscular mientras hacíais ejercicio? Los calambres musculares son frecuentes cuando no se ha calentado adecuadamente antes de comenzar el ejercicio y cuando no se hacen estiramientos musculares posteriores a la actividad deportiva… Pero eso no es todo, quizá vuestra dieta no contiene la suficiente cantidad de magnesio que vuestro organismo necesita.
Conocido por muchos como el mineral “anti-estrés” y/o “amigo de los músculos”, el magnesio es uno de los minerales realmente importantes para nuestro cuerpo porque es necesario para poder realizar correctamente múltiples funciones corporales: en el sistema muscular, en la asimilación del calcio y distribución de sodio y potasio a través de las membranas celulares, en el funcionamiento del cerebro, en la producción de energía y en muchos otros procesos vitales.
Fatiga, cansancio, estrés, debilidad, calambres musculares, o hasta insomnio, son algunos de los síntomas debidos a una falta de magnesio en el organismo.

Las personas activas, estudiantes, mujeres embarazadas, deportistas o que realizan esfuerzos físicos fuera de lo normal, tienen un consumo más elevado de magnesio. También los fumadores y las personas sometidas a dietas especiales, como las de adelgazamiento. A todas ellas les puede ser beneficioso un suplemento de este mineral.
El magnesio se encuentra en cantidades importantes en los vegetales de hoja verde, dátiles, legumbres, soja, semillas, frutos secos, marisco, cacao y en menor cantidad, cereales integrales.
Si optáis por tomar un suplemento adicional, os aconsejo que tengáis muy en cuenta la forma en la que éste se presenta, ya que de ello depende su asimilación en el organismo. La forma con mayor tasa de absorción son los minerales, (en este caso el magnesio) “quelados con aminoácidos”. Mirad bien los detalles en la composición del preparado que vayáis a comprar, y si no lo tenéis claro, preguntad a un profesional sobre el tema.

Besos desde mi blog!!!