Maldito karma, de David Safier

Título: Maldito karma Autor: David Safier Editorial: Seix Barral Año de publicación: 2009Páginas: 313ISBN: 9788432228582 Por fin he podido leer Maldito karma. Después de ver muchas reseñas y comentarios muy positivos sobre esta novela, hace un mes la reservé en la biblioteca y la semana pasada llegó a mis manos. Pero ahí ha durado muy poco, porque sólo me ha durado un par de días. Tenía muchísimas ganas de leerlo, unas expectativas muy altas. Y la verdad es que se han cumplido, pero sólo en parte. La historia me ha gustado mucho. Me ha parecido original, actual, divertida y llena de ironía. Pero no me he reído todo lo que esperaba. Aun así, sé que es culpa mía y no de la novela. Me pasó lo mismo con El asombroso viaje de Pomponio Flato, de Eduardo Mendoza. Todo el mundo se había reído muchísimo con ese libro y a mí no me arrancó ni una carcajada. Y ahora me ha ocurrido igual. Es cierto que la historia me ha resultado muy divertida, pero no tanto como esperaba. Por el contrario, lo que más me ha gustado no ha sido la inesperada muerte de la popular presentadora de televisión Kim Lange, su reencarnación en hormiga, cobaya, vaca, lombriz, escarabajo, ardilla y perro o su peculiar relación con el reencarnado Casanova. Es cierto que me he reído a ratos, que la historia me ha atrapado, me ha entretenido y me ha divertido. Eso no lo voy a negar. Pero sin duda lo que más me ha gustado ha sido la historia de fondo, todo lo que hay detrás. En definitiva, la moraleja de esta fábula, la lección de este cuento que con mucha originalidad, imaginación y grandes dosis de humor nos ayuda a reflexionar sobre nuestras vidas y sobre lo que nos importa y lo que realmente debería importarnos en nuestro día a día. A pesar de sus inesperadas y locas aventuras como animal, Kim Lange nunca deja de ser una persona. Una mujer al principio odiosa, obsesionada con su carrera profesional, con la fama y con llamar la atención de los hombres. Especialmente de Daniel Kohn, su rival en la televisión y su amante en la cama. Una mujer que poco a poco dejará de parecernos odiosa para transmitirnos lástima y ternura y que ha dejado de luchar por Alex, su marido, por el amor y por salvar su matrimonio. Pero, sobre todo, una mujer que no ha sabido querer, proteger y cuidar a Lilly, su hija. Aunque tarde, con la ayuda de Casanova y de Buda, Kim sabrá ver la vida que ha perdido desde otra perspectiva. Un nuevo punto de vista que le abrirá los ojos y le hará comprender todo lo que ha perdido. Lo de dejar de ser humana es lo de menos. Lo que de verdad le importa es haber perdido a su familia. Kim comprende al fin que no valoramos lo que tenemos hasta que lo perdemos. Y su antigua amiga Nina se encargará de demostrárselo. Pero Kim no está dispuesta a perder a su marido y a su hija dos veces. Por eso hará todo lo posible para acumular buen karma, subir en la escala evolutiva, acercarse a su familia y recuperarla, cueste lo que cueste. Aunque eso le suponga tragarse su orgullo y admitir que Nani realmente les hace bien a Alex, a Lilly y hasta la alcohólica, insensible y egoísta de su madre. Y casi sin darse cuenta Kim acabará comprendiendo que reencarnarse y ser rechazada por el nirvana una y otra vez no es tan malo. Que se puede ser feliz sin alcanzar el nirvana, la felicidad eterna, el paraíso. Y, sobre todo, Kim entenderá que en la vida lo más importante no es ganar el Premio TV a la mejor presentadora, ser la periodista más popular de Alemania, acostarse con Daniel Kohn o librarse de las cartucheras. Que no importa que tu familia, tu matrimonio, tu trabajo o tu vida no sean perfectas. Porque lo único que de verdad importa en la vida, en la muerte y en la reencarnación es ser feliz con lo que se tiene y luchar cada día para cuidarlo, conservarlo y no perderlo. Porque no siempre Buda nos dará tantas oportunidades de enmendar nuestros errores y recuperar a tiempo lo que hemos perdido por no saber valorar lo que tenemos.