Mañana el gordo de navidad!!!

Reconozco que no juego a la Lotería ni creo que el Gordo de la Navidad -con perdón, aunque sea Papá Noel- me traiga la felicidad a mi vida! Pero hoy, al parecer, es el último día para ser pobre y vivir una vida a medias o simplemente soñar, sin hacer de los sueños una realidad! Mañana es el día de la Lotería de Navidad! En el día de la lotería, en cualquier calle, comercio o bar resuena la ya clásica canturrina de los niños del colegio San Ildefonso, gritando, bola a bola, los números agraciados y presagiando una nueva vida para los afortunados. Durante toda la mañana, la TV retransmite en directo el sorteo y las unidades móviles se desplazan para encontrar a los afortunados con algún premio! Ni que decir tiene que, en épocas de crísis económica, es cuando más personas confían en la suerte -y seguramente menos en ellas mismas-… y participan en la lotería! Sin embargo, recuerda que álguien dijo que “no es más rico el que más tiene, sino el que necesita menos para vivir“!

Mañana será un día especial para mucha gente! Esbozarán una amplia sonrisa y estarán pendientes de lo que ocurra en la lotería! Muchos, incluso soñarán en cómo gastar el premio que esperan ganar. Algunos desearán cambiar su vida, otros seguirán igual, aunque “tapando algunos agujeros y viviendo más tranquilos, sin necesidad de trabajar“, como suelen manifestar los que ganan algún premio al ser entrevistados! Descorcharán cava ante las cámaras y brindarán por esa nueva vida colmada de dinero… ¿y también de felicidad?

Desde luego, soñar es grátis! Y soñar en la suerte aún lo es más… solo hay que invertir en algunos décimos de lotería y esperar que la estadística de la probabilidad haga el resto! Pero también dijo alguien que “la suerte es la conjunción de la preparación y la oportunidad“! Personalmente creo que es así! No depende de la lotería, ni de otro juego de azar ni de la probabilidad, sino de saber ver las oportunidades en cuanto aparecen y estar preparado para saberlas aprovechar! Si no, la suerte en la vida sería solo fruto del azar! Creo que la vida nos da oportunidades continuamente para mejorar en cualquier ámbito de nuestra vida. Pero, lamentablemente, no sabemos verlas o no sabemos aprovecharlas en cuanto aparecen! Esperamos y esperamos sin hacer nada… y esas oportunidades pasan desapercibidas junto a nosotros, mientras seguramente estamos distraídos mirando hacia otro lado o teniendo nuestra esperanza puesta en los demás o en el azar!

Estar atento es tan importante como comprar un décimo de lotería! Si no lo compramos, nunca nos podrá tocar! Y, siguiendo con el símil, en la vida si no estamos atentos a lo que somos y a lo que ocurre en nuestro interior, difícilmente podremos aprovecharnos de las oportunidades que continuamente aparecen en el exterior! Supongo que, si uno no sabe lo que espera y desea como oportunidad, dificilmente la podrá encontrar! Por eso es importante saber quién y cómo somos y qué queremos en nuestra vida, para luego poderlo encontrar en cuanto aparezca, seguramente sin avisar! No hacerlo así, sería como jugar a la lotería sin saber el premio que nos pudiera tocar o esperar que nos toque, sin tener un décimo para jugar!

Seguramente en la vida ocurre muchas veces que no sabemos exactamente qué premio deseamos alcanzar! Supongo que cada uno pide lo que no tiene o lo que le falta! Pero, en la vida, eso no siempre se cumple! Muchas veces debemos estar preparados, tener nosotros antes algo, para luego poderlo desear! Sin ir más lejos, si no nos amamos a nostros mismos, difícilmente nos amará alguien más! Simplemente porque no sabremos valorar aquello que esperamos o recibimos de los demás! Y la vida no es un bombo de lotería lleno de infinidad de números que caen por azar, sino es un entramado de circunstancias que a cada uno le toca vivir, con el propósito de que aprenda primero y luego sea capaz de vivir, sintiéndose feliz! Aprender es prepararse para vivir y saber ser feliz! Y muchas veces ese aprendizaje exije esfuerzo y, por qué no admitirlo, algo de sufrimiento! Simplemente porque el sufrimiento nos despierta a la realidad y, nos guste o no, en ella está la posible felicidad. “La letra, con sangre entra“, que diría un maestro de escuela o bien “cuando la flecha atraviesa el corazón, duele, pero puede ser utilizada para aprender“, que diría un taoísta!

No creo que sea necesario sufrir para aprender, aunque sufrir es la mejor manera de aprender, en la vida! En cualquier caso, aunque mal de muchos no sea un consuelo, la verdad es que la vida no nos pregunta si queremos o no sufrir! La vida nos da unas oportunidades y circunstancias para ser felices y otras, para sufrir! Y es que, muchas veces, el ser humano necesita saber lo que es, por ejemplo, la infelicidad, para luego poder descubrir y vivir mejor la felicidad! No hay atajo posible, somos así! Recuerda que sufrir nos ayuda a despertar… a lo que realmente somos y sentimos! Y, cuando uno está al fin despierto a lo que es y siente y a su realidad, luego resulta fácil encontrar las oportunidades en la propia vida para sentirse feliz! Ser feliz es, simplemente, ser cada día más uno mismo, sentirlo intensamente y saber encontrar lo necesario para vivirlo cada día más, compartiéndolo con los demás! Y esa felicidad, simple, cotidiana y compartida, es la que nos permitirá encontrar la paz y el amor que todos buscamos y deseamos en nuestra vida, más que cualquier otra lotería de Navidad!

Si me preguntara la vida qué premio deseo en mi vida ahora, sabría que responderle: Amor! Porque la felicidad me ha llegado, efectivamente, junto al amor, en cuanto fui capaz de abrir mi corazón! Por eso a mí ya me ha tocado la lotería y hoy amo y me siento amado, de verdad! ¿Es posible otro premio mejor? Pero, te aviso, aún así, mi vida no necesariamente ha cambiado! Solo estoy aprendiendo cada día a encontrar oportunidades para vivirla de otra manera y, sobre todo, ya con pleno sentido y con amor!

Te traigo un texto ajeno que recibí en una felicitación, que habla de cómo el amor cambia nuestra vida:

La inteligencia sin amor te hace cruel.

La justicia sin amor te hace duro.

El deber sin amor te hace triste.

El poseer sin amor te hace avaricioso.

El honor sin amor te hace arrogante.

La amabilidad sin amor te hace hipócrita.

La responsabilidad sin amor te hace implacable.

El trabajo sin amor te hace injusto.

La vida sin amor no vale nada!

Así es que, si aún no tienes un décimo de lotería de Navidad o, mejor, si tu corazón no está abierto ya, hoy es quizás tu último día para jugar y poder ganar! En todo caso, deseo que hoy sea tu último día de una pobre vida y mañana por fin empiece tu nueva vida plena con mucho amor, te toque o no el Gordo de la Navidad!

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