Manchester, suma y sigue.

Según mi amigo gales el ataque terrorista en Manchester podría provocar una reacción violenta contra el Islam, razón por la que el gobierno May ha adoptado una postura extremadamente conciliadora e integradora y han organizado actos con asistencia de todas las religiones.

El problema es que los británicos empiezan a estar muy hartos de buenismo en contraposición a la prepotencia musulmana.
Los británicos son los que mejor han tratado a los musulmanes en Europa, razón por la que tienen el porcentaje más elevado de ellos en su población, muchos viviendo de las generosas ayudas sociales británicas, y ¿cómo se lo han agradecido?. Aparte el que junto con Francia sea el país que ha sufrido más ataques terroristas, como ocurre siempre donde aparece una minoría musulmana, sin excepción crean muy graves problemas.
En varias ciudades como Liverpool, Leicester, Birmingham y el propio Manchester, al igual que ocurre en Francia, existen barrios enteros “No Go”, ocupados en su práctica totalidad por musulmanes a los que los británicos mejor que no entren sino quieren correr serios riesgos físicos, una costumbre muy islámica que practican en todo el mundo. Existe incluso un pueblo que es “No Go” en su totalidad Wisbeach en el este de Inglaterra, que hace unos 10 años tenía 360 habitantes británicos de los que no queda ni uno y hoy día está habitado por unos 1.200 musulmanes y a los británicos se les recomienda ni acercarse.
Si añadimos las típicas quejas musulmanas de lo que les ofende, que van desde el consumo de cerdo en las escuelas a pasear el perro, y frecuentes escándalos por choques con el Islam, como ocurrió hace unas semanas cuando tres jóvenes musulmanes que habían violado repetidamente a un chica en el norte de Londres, al ser juzgados, aparte no reconocer la Justicia y leyes británicas, argumentaron que su religión les autoriza a violar a la mujer que les incita a ello por no vestir de forma recatada. Por supuesto no se libraron de pasar buena parte del resto de su vida en la cárcel.
Todo esto junto con el hecho que a la manifestación del martes en Manchester por la paz entre religiones en la ciudad acudieron incluso un grupo de más de 100 Sij’s hindúes, y ningún grupo musulmán moderado con excepción de unos pocos representantes de asociaciones musulmanas del barrio “No Go”, está siendo aprovechado por los que quisieran mandar a todo el Islam de vuelta a casa para encender los ánimos, y lógicamente están empezando a conseguirlo. Otro argumento que utilizan los llamados xenófobos es que lo son solo con el Islam, porque ningún otro grupo social, religioso o nacional de los muchos que están integrados en el Reino Unido causa ni de lejos los problemas que han llegado a ser el pan nuestro de cada día con el Islam.
Hace años que lo digo. Como nuestros gobernantes no adopten medidas mucho más contundentes contra el Islam radical, nuestra cultura, valores y principios tienen los días contados.