Los mándalas se han puestos muy de moda en los últimos tiempos, para muchos, se trata de un mero pasatiempos para colorear, pero lo cierto es que su valor va bastante más allá y si no conocéis su significado y su gran utilidad, os va a sorprender. Seguid leyendo porque vemos que son realmente los mándalas para colorear, su antiguo significado y todos los beneficios que nos aportan los mándalas para pintar.
Colorear mandalas: beneficios
“La sensibilización del mándala puede tener el potencial de cambiar cómo nos vemos a nosotros mismos, nuestro planeta, y tal vez nuestro propósito de vida propia”.
(Viaje al centro por Bailey Cunningham).
El psicólogo Carl Jung (figura clave en la etapa inicial de psicoanálisis) observó que cuando sus pacientes dibujaban mándalas, ponían orden en su caos interior, descubriendo su poder sanador. Solamente el observarlos, sin llegar a colorearlos, hace que nuestra mente se detenga, y al pintarlos, hacemos terapia.
Crear una mándala es terapéutico, por su capacidad de llevarnos a un estado de relajación y quietud mental que promueve la auto curación física, emocional, espiritual,… es magia sanadora pura.
Si lo que estáis buscando son mándalas para niños, permitidme que os recomiende:
1. “Juego infantil para dibujar mándalas”. Mándalas fáciles que incluyen plantillas, marcadores, papel y manual. Podéis ver más en ESTE ENLACE.
2. “Diseño de mándalas con arena”. Nuestros niños podrán usar mándalas coloreadas y decorarlas con arena también de colores, más información en ESTA PÁGINA.
3. “Mándala para colorear con marcadores”. Libro con dibujos de mándalas fáciles para dibujar que incluye 30 y 12 marcadores/rotuladores, podéis ver este completo kit AQUÍ.
4. “Set de diseño y dibujos de mándalas con motivos de tatuajes”. Me gusta porque son mándalas infantiles que se salen de lo común, podéis ver este kit en ESTE ENLACE. Incluye hojas de papel, marco, pluma, pinturas para colorear mandalas,…
Cómo hacer mándalas
El poder sanador de los mandalas está a nuestro alcance
Cuando nos centramos en una actividad repetitiva, pero amena y agradable, entramos en un estado de meditación profunda que nos conecta con nuestro inconsciente. El lado derecho del cerebro (el responsable de la parte creativa y emocional), transfiere información desde allí y lo exterioriza gráficamente; entramos en el estado emocional del momento y nos conectamos con nosotros mismos, liberando bloqueos mentales internos limitantes como la ansiedad, nerviosismo, depresión, falta de concentración, desequilibrio, estrés,… etc.
Ese estado de relajación para el cuerpo y la mente, semejante a la meditación profunda, así como los beneficios de paz y tranquilidad, autoconocimiento y auto aceptación, es el boom de la arteterapia (terapia psicológica a través del arte).
Los mándalas tienen muchos fines terapéuticos tanto para adultos como niños, puesto que a través de estas creaciones nos conectamos emocionalmente con lo que estamos viviendo en ese momento. Los colores y las figuras vibran. También nos permiten exteriorizar estados emocionales, promoviendo la sanación.
Así que sólo con dibujar un mándala… ¿podemos encontrarnos mejor?
Según los expertos en mándalas para colorear… ¡claro que sí!. Es increíble evidenciar que, en algunos casos, un psicólogo o un psiquiatra con un medicamento no pueden resolver, lo que es capaz de resolver un simple mándala. La medicina moderna aún prefiere primero la acción química de un medicamento en el organismo, que activar natural y espiritualmente nuestros propios mecanismos de auto curación.
Despertamos nuestra creatividad dibujando mándalas
Por ejemplo, hay muchos psicólogos que afirman que, una depresión es tratada con psicofármacos, cuando una crisis puede aliviarse, con el sólo el hecho de contemplar o dibujar mándalas. Estos, hacen que nuestro cerebro se relaje y logre una función anti estrés, equilibrando nuestra función mental y física
Siendo una actividad lúdico-creativa en la que no nos obligamos a estar quietos para parar los pensamientos, afirman que es muy útil para controlar la hiperactividad infantil, canalizándola positiva y productivamente. Si queréis probar estos efectos terapéuticos con vuestros pequeños, os recomiendo estos Talleres de tranquilidad.
Mándalas para adultos. Si estáis buscando mándalas difíciles específicas para adultos o libros de colorear para adultos, os puedo aconsejar:
1. “Mándalas complejos. Libro de colorear para adultos”. Si queréis comprar mándalas, este libro en tapa blanda, tiene un precio ajustadísimo. Podéis ver MÁS AQUÍ.
2. “Naturaleza viva. Libro de colorear para adultos”. Mandalas de animales llenos de creatividad. Más información en ESTE ENLACE.
3. “Arte antiestrés. 100 láminas para colorear”. Perfecto para desconectar y relajarnos, más INFORMACIÓN AQUÍ.
4. “Con amor: libro de colorear para adultos”. Su precio es irresistible y sus dibujos ideales. Más en ESTA PÁGINA.
Mándalas para niños: desarrollo psicológico infantil
Como espontaneidad inconsciente, juego e inteligencia, hablamos especialmente del niño. El mándala para pintar, activa y potencia la inteligencia y la creatividad infantil, y se convierte en nuestro aliado perfecto para desarrollarla. Como dinámica expresiva (el juego) y plástica (dibujo y pintura), desarrolla los sentidos, la percepción, imaginación, la iniciativa individual y desencadena la libre expresión.
En el ámbito cognitivo, desarrolla la fluidez, flexibilidad y originalidad en las ideas del pequeño. Mejora la concentración. En el afectivo y social, desarrolla actitudes creativas frente a las situaciones que se presenten. Y en el psicomotor, logra que nuestros chicos se expresen creativamente con el uso de las distintas técnicas plásticas.
La terapia con mándalas para niños es fácil y económica, creativa y artística, lo que la hace muy atractiva. Da igual si preferimos observar o pintar, en ambos casos, nos produce estados de relajación que invitan a la meditación, una terapia eficaz para quien busca salir de la rutina.
Cómo hacer mándalas
Nuestras claves son: paciencia, tiempo y disposición para pasar el rato con nuestro mándala. Dibujarlo, colorearlo, tejerlo, recortarlo, “liberarlo”, es simplemente dejarnos llevar, fluir con el diseño y el material que seleccionemos, dejar libre nuestra creatividad. Entendamos que es una meditación activa, donde exteriorizamos nuestros sentimientos, emociones, ánimo, y nos despertamos en el ahora.
No hay patrones predeterminados, pero sí tendremos en cuenta que a partir de un centro, se darán reiteraciones que producen una variación ordenada y previsible. Así, podemos variar en color y diseño, pero siempre con un centro y los cuatro puntos cardinales.
¿Cuáles son los mejores mándalas?
Los mándalas más impresionantes son los que surgen directamente de la imaginación. Sin que haya un pensamiento o propósito preconcebido, así que tan sólo… debemos dejar fluir nuestro yo interior.
Podemos elegir y contemplar el que más nos atraiga, o podemos usar libros de mándalas para colorear. Si nos apetece, podemos crearlos sobre papel o tela, o armarlo con piedras, tallar en madera, lo que queramos.
La contemplación de los mandalas es relajante y sanadora
La variedad de los materiales, manuales y diseños en el mercado para la elaboración de un mándala es infinita: pinturas, ceras, rotuladores, libros en cualquier formato, tarjetas, guías troqueladas, videos… cualquiera de ellos será fácilmente adquirible. El PlayGo y los Simba Toys son económicos y muy fáciles de usar. Ideales para niños desde los 4 años de edad.
De manera que… en definitiva, como sinónimo de nuestro equilibrio emocional y el de cualquier otra persona en este mundo… ¡no hay excusa para no disfrutar de esta experiencia absolutamente vital, creativa y sanadora!.
Mándalas tibetanos, significado
El vocablo sánscrito “Mándala” o “Mandala”, refiere a un “pensamiento contenido dentro de un círculo”… pero ese pensamiento no queda atrapado allí. Así, entenderemos los mándalas como un diagrama, una representación simbólica, espiritual, del universo. Desde un centro, de adentro hacia afuera, del micro al macro, en constante evolución.
“Hace mucho tiempo existía algo desprovisto de nombre y forma desconocida que ocultaba la tierra y el cielo. Los dioses lo comprimieron contra el suelo. Brahma hizo que los dioses lo ocuparan y lo llamó Mándala.”
(Antiguo relato hindú)
Hindú por origen, pero, gracias a su globalización “ciudadano del mundo”, se manifiesta en todas las culturas, en los 5 continentes: los círculos medicinales y los mándalas de arena indígenas americanos, el reloj del sol azteca, el Ouroborus asiático, el yin y el yang; la oposición entre iguales y su interdependencia y equilibrio. En el Tíbet, un complejo grabado religioso utilizado para la meditación.
Símbolo de la sanación, la totalidad, la integración del ser en su centro, esta representación del cosmos y la eternidad, también es símbolo de belleza, alegría, concentración y espiritualidad.
Quien los elabora obtiene cambios, se siente feliz, percibe un despertar, libera estrés… y sana.
Buen día a tod@s!!
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