Manhattan Beach

   ¡Hola a todos! Pues sí, desafortunadamente hace unos días acabé el videojuego Final Fantasy X, así que he podido volver al mundo de la lectura, aunque ahora echo de menos mis ratos de Play Station.  
   Estaba el otro día con mi cada vez más querido ebook viendo las ofertas cuando me topé con la segunda parte de una saga romántica que me llamó la atención. Así que, después de comprarla, busqué la primera parte, Manhattan Beach y me hice con ella. ¡Empezamos!

Manhattan Beach - Raquel VillaamilEditorial DiëresisEncuadernación: Tapa blandaAño de publicación: 2015Páginas: 320Precio: 15€Precio ebook: 3,99€
Miriam acaba de llegar a la capital del cine y un inesperado accidente le lleva a entablar contacto con el mundo del séptimo arte, del que lo ignora todo y en el que ahora va a cursar un acelerado máster cuando conoce en circunstancias desternillantes al famoso Sean Weller, un actor de irresistible atractivo pero con un pasado difícil, que va a poner a prueba sus sentimientos. En su enamoramiento se cruza un guión misterioso que encuentra junto a Sandra, la belleza californiana y aspirante a actriz con la que comparte casa y fiestas en Los Ángeles. Las cosas se complican y Miriam deberá escoger entre un idilio de cine o su carrera como arquitecta.
La aventura americana de Miriam la lleva de la cálida playa de Manhattan Beach a soñar en las colinas de Hollywood. Y de avión en avión, a los rascacielos de Nueva York y los canales de Venecia.

El humor y el romance que desprende esta novela son proporcionales a las situaciones tan disparatadas e imposibles que vive su protagonista. Manhattan Beach nos ofrece páginas de diversión, comedia, romance y buena música siempre y cuando pasemos por alto lo irreal de la historia.
Reseña 
   Se trata de una comedia romántica, un poco al estilo de Notting Hill. La protagonista es Miriam, una madrileña que se traslada a Los Ángeles para cursar un máster de arquitectura. En esta ciudad conocerá a Sandra, su despampanante y alocada casera, una aspirante a actriz que necesita con urgencia una compañera para compartir gastos. En la situación más bochornosa y divertida conocerá a Sean, un atractivo y misterioso deportista siete años mayor que ella que no pasa por su mejor época. A sus problemas en la universidad se le sumaran los escándalos y celos de Hollywood, mezclando dos mundos completamente diferentes. 
Manhattan Beach
   Tengo que decir que pese a lo inverosímil de todo el argumento (Miriam es la persona con más suerte del universo en todo momento y en todo lo que se propone), la novela me ha gustado y mucho.En mi opinión, los mejores puntos de la obra son tanto su protagonista como el estilo narrativo.
   Miriam es una chica completamente normal, ni se trata de la clásica chica torpe adorable, ni la dependiente enfermiza del chico malo ni tampoco una heroína loca y arrasadora. No. Nuestra protagonista es una chica con un gran sentido del humor, positiva y con la que podemos sentirnos reflejadas, sobre todo con algunos detalles (como ponerle mote a lo que le rodea) y pensamientos puntuales muy divertidos. Por normal general todos los personajes son muy agradables, incluso los que no tienen esa intención, pero también es cierto que son bastante irreales. 
UCLA
   El siguiente punto que me ha gustado es la forma en la que está narrada la historia. Como si se tratara de una pequeña lista de la protagonista, cada capítulo surge de la necesidad de cumplir un objetivo, centrándose en esas acciones y, al mismo tiempo, siguiendo el hilo argumental principal. Todo ello escrito de una forma sencilla, fácil y agradable de leer. 

   En definitiva, es muy probable que tardes muy poco tiempo en leer Manhattan Beach,cuando empiezas no puedes parar hasta que la terminas.Es una lectura ligera y amena, pero también es cierto que no pasará a la posteridad como una novela destacable, pues su historia es tan típica que no aporta nada innovador. Aun así, os recomiendo su lectura, seguro que os gustará, sobre todo si estáis cansados del binomio “chica buena e inocente se enamora de chico malo y grosero”. Un soplo de aire fresco.
¿Qué os parece? ¿Os llama la atención?