Revista Cultura y Ocio
MANIFIESTO DE LA ASOCIACIÓN DE MEMORIA HISTÓRICA DE CARTAGENA Y VARIAS ORGANIZACIONES MAS
Las organizaciones abajo firmantes se dirigen a la ciudadanía de Cartagena para denunciar la permanencia de las denominaciones y símbolos franquistas en los espacios públicos de nuestro municipio, a pesar de haber sido acordada su retirada en el pleno municipal de 30 de diciembre de 2015.
La Asociación de la Memoria Histórica de Cartagena ha estado demandando durante años el cambio de los nombres de las calles y de las plazas con denominaciones franquistas y la retirada de todo monumento, busto, monolito u otra manifestación de homenaje a cualquier símbolo de contenido golpista.
Tras la aprobación de las Cortes Españolas de la Ley de la Memoria Histórica 52/2007, nos congratulamos por tener por fin una base, ya no solamente moral -que la teníamos-, sino además jurídica, para defender nuestras aspiraciones. Pero el cumplimiento de dicha Ley fue sistemáticamente vulnerado, de manera flagrante y vergonzosa, por las anteriores corporaciones de nuestro ayuntamiento. La norma es clara y no deja lugar a duda. La obligación de cumplir las normas es connatural en un Estado de Derecho y en tal sentido, si una norma impone una determinada conducta, debe llevarse a cabo sin que le corresponda a la administración inferior ponderar su cumplimiento o especular sobre la conveniencia o no de aplicarla. Le corresponde, única y exclusivamente, cumplirla y si la norma impone retirar determinados símbolos, debe llevarse a cabo. En definitiva, la Ley impone una conducta al Ayuntamiento de Cartagena que consiste en adoptar las medidas oportunas para retirar todo lo que rezuma a divisa franquista. Por eso, brindamos con gran exaltación la resolución del Pleno del 30 diciembre pasado, por el que se aprobaba la retirada de bustos y monolitos franquistas, y se resolvía, por fin, el cambio de nombres de calles y plazas con denominaciones insultantes para la sensibilidad democrática.
El acuerdo del pleno municipal citado supuso el triunfo de cuantos cartageneros y cartageneras apoyaron esa lucha basada en la dignificación de la ciudad y de su municipio, por entender que la presencia en lugares de visualización pública de tal simbología sólo podía concebirse desde la perspectiva del enaltecimiento de la brutalidad, del retraso, del socavamiento de la legalidad vigente, del derrocamiento de la libertad y del abatimiento de la democracia.
Pasados tres meses del mencionado pleno, aún no se han retirado, ni siquiera, los monumentos dedicados a la ignominia de este país. Por lo que nos vemos en la obligación de exigir, nuevamente, el acatamiento de la Ley 52/2007 de la Memoria Histórica y el cumplimiento de la resolución del pleno del Ayuntamiento de Cartagena del 30/12/2015.
No compartimos la relajación o la dejación de los que tienen que hacer que se cumpla la Ley, como es el caso del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Cartagena. Es por esto que las organizaciones firmantes instamos al Ayuntamiento a que proceda de inmediato a dar las órdenes oportunas para que desaparezca definitivamente de nuestras calles y plazas toda simbología de contenido fascista, restableciéndose con ello parte de nuestra Memoria Histórica, de la dignidad de los caídos en defensa del legítimo gobierno de la II República y de las personas represaliadas por sus ideas democráticas durante los cuarenta años de franquismo.
Cartagena, 14 abril de 2016.