Muchas veces nos sentimos culpables, o hay quien nos hace sentir culpable de algo que no entendemos a discernir que lo seamos.
Es lo que podríamos llamar, la manipulación emocional.
Vivir en sociedad se sustenta en el hecho de que para sobrevivir y sentirnos seguros debemos hacer equipo con el resto de nuestros congéneres, colaborando en equipo y no trabajando en solitario.
Los roles de la sociedad se ocupan de como debe el individuo colaborar para preservar al grupo, sin embargo la atención del individuo y su protección quedan en entredicho.
Grandes hechos históricos demuestran que la manipulación de las masas es una de las bases para forjar un gran imperio, vease como ejemplo el nazismo, la manipulación es algo diario en nuestra sociedad, los medios de comunicación, las propias tiendas de alimentación, las marcas, nuestro propio grupo familiar, de trabajo, el colegio.
No conozco ninguna persona que haya intentado manipular o que no haya sido o intentado ser manipulada durante algún momento de su existencia.
Si aprendes como se detecta una manipulación emocional, puedes evitar el chantaje emocional, en primer lugar vamos a conocer como funciona la manipulación.
Vamos a verlo con algunos ejemplos prácticos muy sencillos que nos permiten a primera vista observar como se ejecuta "el arte de la manipulación", hay auténticos expertos en ello, puedo asegurarlo.
Detectar la manipulación es aprender a no sentirse culpable.
La mayor parte de los casos de manipulación emocional parten de personas de nuestro entorno más cercano, los sentimientos siempre están en el centro de estas situaciones.
Hay quien te recuerda constantemente "lo que yo he hecho por ti", es una de las manipulaciones más básicas y que se repite por doquier, si uno da es para recibir, así que nos sentimos culpables por no estar a la altura y devolver lo recibido.
Una manifestación muy sutil de la manipulación emocional se da cuando entre dos personas.
El individuo que tiene el poder amenaza veladamente a la otra indicando que puede perder determinadas ventajas si no obedece, no obliga a nada, normalmente dice "haz lo que quieras", esa última concesión es la que realmente nos hace sentir culpables.
Es posible que alguna de esas personas cercanas, un amigo, tu pareja, un familiar te de a entender que si no haces algo determinado la relación puede resentirse por ello. ¿te suena?
Hay otra frase de fácil recurrencia, "Sin ti no soy nada".
La otra persona ejerce de víctima, es una fórmula de manipulación emocional muy eficiente, podemos añadirla a la que utilizan muchas parejas que se han separado hacia el que ha roto la relación "me has abandonado".
El autocastigo, "si no lo haces tu, yo tampoco lo voy a hacer", una empatía extraña y velada, que realmente tiene detrás una brutal manipulación, ya que está apelando a nuestra empatía, nos vamos a sentir culpables de que la otra persona no haga lo que desea, se va a castigar por culpa nuestra.
El silencio sin motivo, esta situación se da muy a menudo en el mundo de las relaciones de pareja, también en el resto de las relaciones.
El manipulador muestra que algo le ocurre, a nuestra pregunta "¿te pasa algo?", contesta "no me pasa nada", seguidamente el silencio aparece y un enfado que se puede ver a través de un expresado lenguaje no verbal, en ese momento nuestra mente procesará a toda velocidad que hemos podido hacer para que el otro se sienta mal, culpables sin sentido, al fin y al cabo, culpables.