Siempre hablamos de la falta de apertura en Internet que tienen las empresas (grandes y pequeñas) por miedo a que su imagen sea dañada de forma sencilla por cualquier internauta, es decir se preocupan por la reputación corporativa.
Tras la exposición de casos de empresas importantes como Telefónica o Repsol he sacado mis propias conclusiones. Quizás en algún punto mi falta de experiencia en la materia se detecte, pero creo que se ha convertido en fundamental para cualquier empresa (grande o pequeña):
-Reconocer la capacidad de influencia y el poder que los públicos poseen en la red actualmente
-Realizar un seguimiento monitorizado y un posterior análisis de la reputación positiva o negativa que se haga en la red sobre la empresa
-Desarrollar la capacidad de forma proactiva
Pero ante todo deben estar abiertos a los cambios, a la evolución pues este nuevo canal que nos ofrece multitud de posibilidades se caracteriza principalmente por ser algo en constante evolución.
En el blog de “Comunity Manager Original” encontráis una pequeña síntesis del tema que ha expuesto cada uno de los ponentes. En lo personal, quisiera resaltar una parte de la ponencia de Cristina Aced (quien tuvo que marcharse, junto con Pere Rosales, y no pudieron estar en la mesa de debate hasta el final). Las 3 normas que se han de tener en cuenta en este nuevo escenario:
1. Las personas conversan (habrá que adecuar el tono y el lenguaje para conseguir llegar a ellas)
2. Honestidad y transparencia (han de primar en todas las acciones online)
3. Gestionar la comunicación corporativa de la empresa (es suicida intentar controlar y manipular la)