Pepe Carvalho es una figura que evoluciona con los años: un escéptico sentimental en sus inicios y un amargo y melancólico personaje en sus últimas aventuras. El detective gourmet es un personaje complejo y contradictorio, cuya visión existencial le sirvió al autor como álter ego para retratar sin complejos la sociedad que le rodeaba.
En este cuarto volumen, un joven aparece muerto, desnudo en la arena y con la piel tatuada: «He nacido para revolucionar el infierno.» Una viuda encarga la investigación de la muerte de su marido, hallado con unas bragas de mujer en el bolsillo. Stuart Pedrell, importante ejecutivo, cosido a navajazos en un barrio extremo de la ciudad cuando todo el mundo le suponía haciendo un viaje por la Polinesia. Carvalho, por cuestiones de salud, inquilino de un balneario en el que se topa con el cadáver de mistress Simpson. Cuatro historias del detective Pepe Carvalho donde la huida se convierte en una promesa incumplida: la realidad supera muchas veces a los sueños.