Hace unos días tuvo lugar esta interesante actividad en la que un enorme mapa de 20 por 40 metros pintado en el suelo nos llama la atención sobre la localidad de Los Molinos, en la sierra madrileña.
El grupo de arquitectos n’UNDO junto con el Ayuntamiento de Los Molinos y la Plataforma por el desarrollo de los Molinos, realizó durante unos días este mapa gigante del pueblo que mostraba los elementos protegidos en el Catálogo de Patrimonio histórico-cultural.
Pincel en ristre, cartografiaron en el patio de las Antiguas Escuelas, no sólo las viviendas, sino cada uno de los bienes, edificaciones, puertas, aparejos, cerrajerías, caños y fuentes protegidas. La finalidad del mapa es la de visualizar de una forma clara y atractiva los elementos protegidos del catálogo, de manera que arranque el debate y la proposición.
Estos elementos, al formar parte del Catálogo de Patrimonio, tienen distintos niveles de protección por lo que es obligatorio su mantenimiento. Por otro lado, es una realidad que cada vez más gente busca en la sierra de Madrid viviendas más baratas. De la combinación de ambas cosas cobra sentido la propuesta de impulsar el “alquiler por reforma”, mediante el cual el propietario alquila a un precio bajo a cambio de que el inquilino lo mantenga y/o reforme. Este tipo de relación propietario/inquilino supondría recuperar más del 10% de las viviendas de Los Molinos, las cuales se encuentran actualmente vacías durante todo el año (ni siquiera son segunda residencia). Cada caso particular se resolverá según el estado de la vivienda y las necesidades de cada parte interesada. Se busca así la oportunidad en lo existente como alternativa al sistema inmobiliario de la nueva construcción.
Lo mejor es que el ayuntamiento avala este movimiento, lo que puede dar una mayor confianza a los propietarios. Por la otra parte, ya se ha interesado mucha gente por el tema, como inquilinos dispuestos a reformar y mantener las viviendas a cambio de pagar un alquiler mínimo.
n’UNDO promueve este tipo de acciones desde su línea de trabajo que, como ellos definen, surge como una actitud, una manera de hacer re-arquitectura, interviniendo en el territorio y la ciudad desde la No Construcción, la Minimización, la Reutilización y el Desmantelamiento… Se plantea la no construcción como solución ante determinadas propuestas o intervenciones futuras, innecesarias o no pertinentes; la reutilización de las estructuras abandonadas o infrautilizadas; la minimización de elementos existentes de gran impacto y el desmantelamiento de aquellas construcciones o piezas insostenibles, perniciosas, prescindibles o inútiles.
En Ecosistema Urbano no sólo nos parece interesante si no necesaria, y más hoy en día, hacer realidad la idea de reutilizar estructuras, edificios, o solares en desuso. Parte del cambio actual debería consistir en abrir la mano y ver con qué contamos, aprovechar lo existente y tener la habilidad de exprimirlo mediante la innovación y la creatividad.
De forma coloquial podría decirse quizás que se trata también de “relajarnos” un poco. Haciendo valer nuestra capacidad de leer las necesidades de una comunidad, una barrio o una ciudad, ¿podríamos darle la vuelta al uso que habitualmente hacemos de los recursos que tenemos para ofrecer algo inmensamente mejor? Innovar vs. inventar.
Más información:
Reportaje sobre el evento en Convocatoria por Los Molinos
Catálogo de Patrimonio Histórico y Cultural de Los Molinos