Correr en una cinta mecánica presenta una curiosa dualidad: si por una parte la máquina es mi aliada por acompañarme marcando un ritmo que me evita tenerlo que gestionar, por otra se convierte en mi adversaria al pedirme más y más sin ninguna misericordia en el agotamiento a todas mis lastimeras llamadas de piedad. En Marathon-15% se sustancia muy bien la eterna dualidad hombre/máquina, destinados a convivir y condenados a pelear…
170- La tecnología quita y da, pero siempre ayuda a progresar.