Marc Márquez y el tesoro andorrano

Léame al más puro estilo Harry Potter y la cámara del fénix, por caridad. Porque esta nueva historia épica que traspasa fronteras catalanas y españolas es carne de superproducción, ¿o no?

De los creadores de Si yo pudiese, tampoco pagaba impuestos o Aquí nos roba todo dios, y el que no, tonto es llega… otro gran título español a la cartelera, pero bajo bandera andorrana, eso sí.

Y es que resulta que Marc Márquez, campeón de campeones de lo suyo, ha dicho que eso de pagar al fisco un 40% de impuestos —o los que sean— es para pringados, y que él con 0,3% va servido, mira tú. Y si no lo ha dicho, lo ha hecho, porque por algo hablan de ello, en detalle, Xavier Casanovas, coordinador de la Plataforma por una fiscalidad justa, ambiental y solidaria y Francesc Mateu, director de Intermon Oxfam en Cataluña, en su Carta abierta a Marc Márquez.

Si tú pudieses… cuántas cosas robarías

Parece ser que el tema no es hacer o no hacer, sino tener la posibilidad de hacerlo o no tenerla. Así, los pobres son pobres porque los ricos roban, pero si los pobres fuesen ricos, también robarían. Eso es lo que dice hoy el 90% de los españoles. Y digo yo, si el que no roba es porque no puede, ¿quién somos nosotros para criticar a nadie? ¿Nos hemos dejado la ética en los otros pantalones? ¡Hostia, que hoy he puesto dos lavadoras!

Y el que no roba, es porque no puede

O dicho de otro modo, ¡qué cabrones son los políticos que me obligan a defraudar a Hacienda a pequeña escala! ¡Y qué crack el chavalín este del Moto GP que habrá estudiado en Cataluña, y se habrá curado los constipados en la Cervera, y habrá pedido una beca cuando iban justos en casa… pero ahora que pague impuestos otro, ¿no? Pues toca buscar las siete diferencias entre este chaval y el político de turno me parece.

Al final, el sistema somos todos

¡Y el casco me lo desgravo!

Y si yo tributo, y tu tributas y él tributa… nosotros, estado del bienestar (aunque sea una basura); y vosotros, y ellos… Si yo tributo, y quien puede se escaquea, ¿vaya mierda, verdad? ¡Pero ojo, que cuando pueda, yo también me pongo a hacer contabilidad creativa, nois!

Marc Márquez es el claro ejemplo de una idea que ronda por la cabeza de todos los españoles, y es que yo no lo hago porque no puedo. Y no critico al político, al futbolista o al empresario de la jet set porque roba, sino porque yo no puedo permitirme robar. El que no roba es tonto, y la moral… ¡A otro con ese cuento!

¿Sabes? Yo prefiero ser de ese 99,94% que no es rico, que no cobra más de 600.000 € al año, y pagar a Hacienda, y mantener mis obligaciones fiscales y tributarias al día, y con un poco de suerte haré que un vecino o dos se enteren de lo que significan conceptos como justicia social y redistribución de la riqueza mientras el resto me señalan y me llaman T-O-N-T-O.

Ahora queda ver si este chico ha errado por juventud, delegando tareas éticas que le competen (pues no todo es sacrificio, victorias, derrotas y embolsarse pasta y atenciones); ahora a ver si ha actuado por desconocimiento, o si lo ha hecho con conocimiento de causa, nocturnidad y alevosía. Si es lo segundo, nosotros y el sistema estaremos un poco más perdidos todavía.

En definitiva, ¡viva Andorra! I aneu a prendre pel cul.