O lo que es lo mismo, marcha en contra del Gaymonio. No en contra de las uniones homosexuales, que las hay y ya están jurídicamente ordenadas, sino en contra de la confusión. O lo que es lo mismo, marcha a favor del matrimonio y a favor de los derechos de los niños. Esto es lo ocurrido en París el pasado domingo. No ha sido una manifestación de la derecha francesa, como nos la presentaba la televisión española. Ha sido una manifestación plural, de personas de muy distintas procedencias, pero con un denominador común: estar en contra del proyecto de ley promovido por el presidente Francois Hollande para legalizar las uniones homosexuales y la adopción de niños por parte de estas parejas.
Desde una mujer gay, francesa que manifestaba no querer ni el matrimonio ni la adopción hasta jóvenes mujeres se vestidas como revolucionarias francesas mientras mostraban letreros en donde se leía "no toques mi código civil", en alusión al proyecto socialista impulsado por Hollande. También algunos socialistas estuvieron presentes en la manifestación, gritando: "vuelve, Jospin, se han vuelto locos".
Todo un alarde sentido común: 34 Asociaciones que han sido capaces de reunir a más de un millón de personas. Si los socialistas franceses conservan algo de espíritu democrático deberían reflexionar.