Hoy os traigo unas fotos de la entrada de mi casa. Es muy pequeña, no cabe ni una mini-balda, pero hemos colocado (con nuestras manitas) un papel de rayas verticales en tonos marrón y vainilla, y unos vinilos floridos para alegrar un poquito el gotelé blanco anterior y mejorar así el paso a casa.
Como detalle os contaré que, como cambiamos también de lámpara (regalo de mi hermana :D) y, viendo que los taladros no coincidían con los anteriores, pusimos algunas de la flores de vinilo alrededor de la lámpara para disimular el aguaplast. Y de paso, decorar el techo.
Lo único que cabe en la pared, aparte de el cuadro de luces (feísimo), es un espejo enmarcado en madera.
Lo que más me gusta es el efecto que tiene la luz al pasar por la lámpara y llegando a la pared.
¿Os ha gustado entrar en casa?...Adelante, adelante, voy preparando un cafetito...estáis en vuestra casa.