La diseñadora María Barros se ha inspirado en el mundo del vino para crear su nueva colección Primavera-Verano 2014, porque piensa que la mujer y esta bebida son muy parecidos, y de este modo nace “Coupage”, una unión entre el vino y la moda.
María Barros, apuesta por las siluetas del vino que marcan una línea femenina y romántica, en la que los tejidos fluidos como la gasa, la seda y los algodones aparecen por doquier, convirtiéndose en los reyes de su nueva colección moda mujer 2014.
El vino y la moda se unen en María Barros en MBMFW
Una colección sobre la que la diseñadora ha hablado mucho con la sumiller y enóloga Cristina Alcalá. De estas conversaciones, estas dos mujeres se dan cuenta de lo mucho que tienen en común sus profesiones, incluso en las palabras que usan a diario como las texturas, la artesanía, formas, volúmenes, etc.
“Sin ninguna intención y conversando con la sumiller Cristina Alcalá, me di cuenta de que el proceso creativo a la hora de elaborar un vino sigue las mismas pautas que yo sigo para realizar una colección de moda“, nos cuenta la diseñadora.
A partir de estas charlas entre dos amigas surge, en la mente de María Barros, una mujer femenina, frágil, que odia las estridencias, a la que le encanta lucir tejidos fluidos como largas gasas y sedas.
Cabe destacar el trabajo en los cortes y el patronaje, el modelaje de la tela. Una colección en la que destacan los vestidos, porque según María, es la prenda que más se parece al vino.
Para la Primavera-Verano 2014, María Barros nos propone el pantalón con cintura media, sin marcar cadera y faldas preferentemente midi.
Una colección muy femenina, en las tonalidades típicas del vino, que seguro no dejará indiferente a las amantes de la elegancia y de la sencillez.
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