María de San José. Testigo fiel y valiente

El P. Ildefonso Moriones, ocd, nos regala un nuevo libro. En esta ocasión, la protagonista es una de las carmelitas descalzas de la primera hora. Lleva por título: MARÍA DE SAN JOSÉ SALAZAR, 1548-1603. Testigo fiel y valiente. Ha sido publicado por Ediciones "El Carmen", de Vitoria. La obra forma una trilogía con otras dos anteriores, dedicadas a otras dos personas que la historiografía de la Orden ha postergado desde los orígenes y que os invito a conocer también: Ana de Jesús y Jerónimo Gracián.

Recogemos aquí unos párrafos de la Introducción del libro, y agradecemos al P. Moriones su trabajo constante para dar a conocer las figuras más señeras de nuestra familia religiosa.

INTRODUCCIÓN

María de San José tuvo conciencia, y lo dijo, de que quienes mejor conocían a la Santa Madre Teresa de Jesús eran sus hijas, pues pudieron observar de cerca sus virtudes, aventajando en eso a quienes la trataron esporádicamente o tuvieron noticia de ella sólo de oídas. De ahí su decisión de escribir para utilidad de sus hermanas e hijas contemporáneas y para enseñanza de las que vinieran después.

Remitiendo para otros detalles a las biografías de María de San José publicadas recientemente, mi propósito es presentar a los lectores de hoy la figura de esta hija de santa Teresa en su condición de testigo fiel y valiente.

Fue testigo de la vida de Teresa durante todo el arco de su tarea de Fundadora (1562-1582) y tan fiel que la misma Santa, el 17 de marzo de 1582, la indicó como la más apta para ocupar su puesto, no solo después de muerta ella, sino aun en vida. Su valentía tuvo ocasión de demostrarla para hacer frente a personas que se creían llamadas a perfeccionar la obra de santa Teresa.

La tutela y transmisión a la posteridad del espíritu teresiano, que entre los frailes quedó confiada al padre Jerónimo Gracián, entre las monjas quedaba al cuidado de cada madre priora, representante de santa Teresa en su comunidad y celadora del espíritu encarnado en las Constituciones de la Santa Fundadora.

Visto desde esta perspectiva se comprenderá mejor por qué la casi totalidad de este libro se debe a la pluma de María de San José.

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Mi intención, al presentar a María de San José como testigo fiel y valiente de la Madre Fundadora, es invitar a leer sus palabras como si se tratara de una serie de cartas dirigidas a sus hijas y hermanas. Esta larga conversación, que abraza todo el arco de su vida, viene a ser una auténtica autobiografía de María de San José.

Pamplona 23 de enero de 2021

P. Ildefonso Moriones, C.D.