La mujer del torero Jesulín de Ubrique estaba cursando hasta hace pocos días la carrera de Odontología en la Universida Europea de Madrid. Esta entidad elitista y privada, por la que pagaba unos 10.000 euros al año, le permitía asistir en la modalidad de semipresencial un día o dos a la semana a clases; en vez de los cinco días de rigor en el resto de universidades.
Todo parecía marchar bien , pues la mujer del torero iba aprobando sus asignaturas, por lo tanto este no es el motivo de su expulsión. Según hemos sabido, el propio rector de la universidad le ha comunicado que debido a su inculpación en el caso que pretendía conseguir una paga para su madre; y debido a que la universidad tiene entre sus normas poder expulsar a alumnos culpables de delitos por fraude, se veía en la obligación de impedirle el continuar sus estudios en esa universidad.
La entidad universitaria se ha desvinculado así de la negativa imagen pública de Maria José; que ya antes del veredicto como culpable repercutía negativamente en la especialidad de odontología que se cursaba en la universidad.
María José entre sollozos le prometió al rector que eso no iba a quedar así, puesto que la suya no es una sentencia firme y está recurrida. Así que ha decidido poner el caso de su expulsión en manos se sus abogados. Veremos que pasa finalmente, ¿seguirá estudiando su carrera?