
"Trapper Man" es sin duda la canción perfecta para poner como entradilla al disco. En ella esta una melodía dura y directa, con una voz femenina que carga de una forma muy a los años sesenta. Década por la que llega a mirar mucho musicalmente a la hora de enfocar el nuevo álbum. No hace mucho ya nos mostró dos canciones de adelanto como fueron "Back On the Dance Floor", y "Good On You Son".
"When You Leave" es una balada de corte Chet baker, esa trompeta tristona y melancólica que arrastra la poesía desencantada de Knopfler. Es sin duda un tema muy intenso y en el que se llega a arriesgar con este tipo de composiciones dentro de una de sus grabaciones. Otro de corte jazz y más animado está en "Nobody Does That" la cual se asoma una guitarra muy cercana al Funk, con la presencia de sintetizadores y elementos de electronica. Mientras que "Rear View Mirror" es un R&B muy movido de la escuela del inmortal Ray Charles. En esta ocasión emula a la perfección el estilo y lo hace en algún momento suyo.
En lo general, Mark Knopfler sigue sumergido en su visión sobre el Folk, con canciones de su propia cosecha como pueden ser "Nobody’s Child", con una guitarra que lanza algún riff entre la acústica. O su propia visión acerca del Country en "Just a Boy Away from Home".
Down the Road Wherever no hará que de pronto rejuvenezca 20 años o más; pero sí que sigue una estela musical muy digna, con un disco que le volverá a servir de excusa para volver a impregnar su directo de savia nueva.
Nota: 7'5/10.