Más allá de la competencia

INVESTIGACION Y DESARROLLO DE CONCEPTOS

Utilizo la expresión investigación y desarrollo de conceptos para establecer un deliberado paralelismo con la investigación y desarrollo técnico. La industria química de los Estados Unidos gasta 17 mil millones de dólares anuales en investigación y desarrollo técnico y la industria farmacéutica gasta 8200 millones de dólares. Se desembolsa este dinero porque las empresas saben que tienen que invertir en investigación técnica para  atenerse en el negocio.

A mi juicio, en el futuro el desarrollo de conceptos será tan importante como el desarrollo técnico. Me atrevería incluso a decir que el primero será más importante. Usted puede copiar o pagar por la licencia de la tecnología, pero necesita tener una serie de conceptos. Aun cuando adopte la estrategia «yo también» y espere únicamente a que otros desarrollen un concepto para luego seguirlo, necesitará algunos propios para hacerlo con éxito.

Como he mencionado anteriormente, la tecnología se está convirtiendo a marchas forzadas en una mercancía. Lo que realmente tendrá importancia son los conceptos de aplicación.  Esto se está dando en el área de productos y siempre se ha dado en el área de servicios, ya que el servicio consiste directamente en conceptos de valor y de organización para entregar valores.

Necesitamos empezar a reconocer que los conceptos son tan vitales para los negocios como las finanzas, las materias primas, la mano de obra y la energía. Implícitamente ya todos los saben. En el fondo, todo negocio no es más que un concepto. Se hará necesario reconocer la importancia de los conceptos de forma explícita y seria.

Los buenos conceptos, al igual que las buenas ideas creativas, se dan hoy como siempre se han dado. Surgen de individuos con talento que se encuentran a un nivel suficientemente elevado en una organización como para provocar que haya cambios. A veces los grupos de estrategia de la empresa asumen la tarea de desarrollar conceptos. Otras las agencias de publicidad colaboran con los conceptos del producto y hay consultoras específicas para nuevas reacciones. Finalmente, la copia es una fuente de cambio de conceptos muy utilizada.

Los conceptos son los organizadores de la información y la acción. Siempre estamos utilizándolos. Cuando pensamos que no lo estamos haciendo, lo que ocurre es que seguimos utilizando conceptos obsoletos y tradicionales, generalmente sin ser conscientes de su naturaleza.

Edward De Bono, “Más allá de la competencia”

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