En concreto, más de 910 ejecutivos de todo el mundo esperan ver una transformación radical del sector en los próximos 5 a 10 años. Los ejecutivos ofrecen sus puntos de vista sobre las principales fuerzas que dan forma a la industria, desde los problemas de la cadena de suministro y los sistemas de propulsión, hasta el cambio en el comportamiento del consumidor y los nuevos participantes en tecnología.
Los ejecutivos automotrices globales confían en que la industria automotriz experimentará un crecimiento más rentable en los próximos cinco años, pero las expectativas de ventas de vehículos eléctricos (EV) en todo el mundo en 2030 son cada vez más realistas. Al mismo tiempo, los ejecutivos siguen muy preocupados por el suministro de productos básicos y componentes.
En medio de una plétora de nuevos modelos, participantes y tecnologías, los ejecutivos creen que las decisiones de compra de los consumidores en los próximos cinco años se centrarán en la importancia de impulsar el rendimiento y la imagen de marca. La privacidad y la seguridad de los datos también son factores clave en las decisiones de compra.
Si bien gran parte del optimismo entre los ejecutivos sobre el futuro puede estar bien fundado, los cambios sin duda producirán tanto ganadores como perdedores, lo que hará que las decisiones de los ejecutivos de hoy sean aún más críticas.
Los directivos del sector del automóvil son más optimistas que en 2021 sobre las perspectivas de crecimiento rentable a largo plazo. El 83% confía en obtener mayores beneficios en los próximos cinco años, frente al 53% en 2021
Sin embargo, se han vuelto más cautelosos sobre los resultados a corto plazo, dados los vientos en contra a los que se enfrenta la economía mundial: al 76% le preocupa que la inflación y los altos tipos de interés afecten negativamente a su negocio en 2023
Los directivos del sector automovilístico son muy optimistas sobre las perspectivas de ingresos posventa. El 62% confía plenamente en que los consumidores estarán dispuestos a pagar cuotas mensuales de suscripción por servicios de software como la recarga de vehículos eléctricos, el análisis del mantenimiento del vehículo, la asistencia avanzada al conductor y otras actualizaciones inalámbricas.
Los ejecutivos creen que los fabricantes de automóviles siguen considerando el mercado de seguros como una oportunidad clave de crecimiento, pero han pasado de competir contra las aseguradoras a asociarse con ellas o venderles datos.
El futuro de las cadenas cinemáticas
Las expectativas de ventas mundiales de vehículos eléctricos (VE) en 2030 son cada vez más realistas. En 2021, los ejecutivos preveían que los VE acapararían entre el 20% y el 70% del mercado en 2030. Ahora se muestran más prudentes ante los retos que plantea el cambio a la energía de las baterías, con previsiones que oscilan entre el 10% y el 40% de las ventas en 2030.
En concreto, los ejecutivos han moderado mucho sus expectativas sobre el crecimiento de las ventas de VE en India (escasa infraestructura), Brasil (biocombustibles como alternativa) y Japón(apuesta por híbridos y fuentes de energía distintas de las baterías).
Sin embargo, hay más confianza en que los VE alcanzarán la paridad de costes con los vehículos con motor de combustión interna (MCI) sin ayuda gubernamental. El 82% cree que en los próximos 10 años los vehículos eléctricos podrán adoptarse de forma generalizada sin subvenciones. Y el 21%, tres veces más que en 2021, no cree que los gobiernos deban conceder ayudas directas a los consumidores de VE
Cadenas de suministro vulnerables
Los ejecutivos siguen muy preocupados por el suministro de materias primas y componentes, especialmente semiconductores, así como de artículos como acero eléctrico y materiales ligeros, cruciales para aumentar la eficiencia del combustible y ampliar la autonomía de las baterías.
En respuesta a la vulnerabilidad de los suministros, los fabricantes de automóviles se centran en la deslocalización próxima y la deslocalización posterior, en un esfuerzo por reducir su dependencia de sólo uno o dos países.
Consumidores digitales
Con la proliferación de nuevos modelos, participantes y tecnologías, los ejecutivos creen que las decisiones de compra de los consumidores en los próximos cinco años se centrarán en el rendimiento y la imagen de marca. La privacidad y la seguridad de los datos también son factores clave en las decisiones de compra
Se espera que los clientes de automóviles compren cada vez más en línea, lo que abre oportunidades para que los fabricantes vendan directamente a los consumidores, así como en línea a través de los concesionarios. Los operadores tradicionales del comercio electrónico también competirán por los compradores de coches.
Nuevas tecnologías y nuevos participantes
Muchos ejecutivos creen que Apple entrará en el mercado automovilístico y se convertirá en líder de los vehículos eléctricos en 2030, pasando del noveno puesto en 2021 al cuarto en la encuesta. Se espera que Tesla siga siendo el líder del mercado de vehículos eléctricos.
Sea cual sea la empresa que se convierta en líder, nueve de cada diez ejecutivos afirman que las start-ups tendrán un efecto considerable en la industria automovilística.
Más de uno de cada cinco afirma que es muy probable que venda partes no estratégicas de su empresa, dadas las enormes inversiones necesarias para competir.
La fabricación por contrato será aún más estratégica en el futuro