Compré al azar la Madre de corazón atómico, lo último de Fernández Mallo, una reflexión sobre y tras la muerte de su padre. Me tira la materia. Al autor lo conocí, como tantas otras cosas, por Hornuez. Una historia bien contada, con frases brillantes, pero con un final menos interesante que el principio. Entre las reflexiones:
- “Tardas algún tiempo en darte cuenta de que la gente se muere para hacerse imprescindible.”
- “Si es cierto, que todas las relaciones de pareja comienzan como algo irreal que, tarde o temprano, se convertirá en real, la relación con los padres sigue el camino exactamente inverso, desde el instante en el que naces, la más empírica y carnal realidad va mutando hacia el reino de la fantasía, la idealización de los progenitores…”
- "Entendí que el problema de identidad es el único asunto acerca del que merece la pena pensar, y también el único del cual es imposible llegar a resultado alguno."