
El 6 de octubre de 1902, en una escuela del pueblo de Droyssin, un maestro de 40 años de edad estaba impartiendo clase. Sin motivo aparente, ante lo que parecía un ataque de locura, se precipitó a su escritorio, sacó un revólver y comenzó a disparar a diestro y siniestro sobre los niños aterrorizados. Tres alumnos murieron y otros tres fueron heridos de gravedad. Oyendo los disparos, los aldeanos que se encontraban alrededor de la escuela, llegaron rápidamente y ante la escena que presenciaron, lincharon al profesor.
