Pudimos hablar con Carlos Pacheco, artista español en la todopoderosa Marvel, que dio en la ESNE de Madrid una interesantísima masterclass con motivo del estreno de la última película de la factoría de cómics: El soldado de invierno. Esto es (solo una parte de) lo que dio de si.
por Sofia Pérez.
Dentro de la campaña de promoción de la película Capitán América. El soldado de invierno, que se ha estrenado en España el pasado 28 de Marzo, Disney y Marvel organizaron en colaboración con la Escuela Universitaria de Diseño, Innovación y Tecnología ESNE el pasado día 14 una masterclass con Carlos Pacheco, artista español que lleva trabajando para la editorial estadounidense de cómics durante más de 30 años, a la que pudieron asistir alumnos de la escuela y algunos medios. Con este motivo, publicaremos dos artículos de lo que dio de sí la completa clase de Pacheco, que nos habló del Universo Marvel y del Capitán América en general, de su trabajo con el personaje en concreto, y también respondió a las preguntas de algunos de los asistentes. Sobre Capitán América. El soldado de invierno, Pacheco afirmó que, “en honor a ella, tengo que decir que es una de las pocas películas de superhéroes que tengo ganas de ver. Tiene muy buena pinta, y no me pagan por decirlo. Esperemos que responda a las inquietudes”, añadiendo que “sigo pensando que debería haber Oscar al mejor tráiler. Este tráiler es espectacular. Pero claro, lo suelen ser todos los de las películas de superhéroes. Y después sale otra cosa”.
A continuación, os dejamos la primera parte de la clase, en la que Pacheco realiza un recorrido por a la historia del Capitán América a través de los cambios que se han ido produciendo en el Universo Marvel, hasta llegar a las últimas películas de la compañía:
“Supongo que si habéis venido aquí es porque sois aficionados a los superhéroes o a las historietas, que son dos cosas distintas. Puedes ser aficionado a los superhéroes sin tener ningún interés en la historieta, como suele pasar en los últimos tiempos. Yo soy dibujante de historietas, me interesan como medio con el que contar historias, y habitualmente lo he hecho con superhéroes. De hecho, el superhéroe nace en el seno de la historieta, y es en él en el que se ha desenvuelto desde que aparece Superman en 1938 hasta casi el presente. Hoy en día, ha dado el salto a otros territorios como pueden ser la televisión, dibujos animados, cine, etc., y ha encontrado un sitio donde estos personajes están dando unos beneficios que eran impensables en el mundo de la historieta. Y esto ha hecho que empresas que hasta hace poco se llamaban editoriales, pasen a ser corporaciones que explotan los derechos industriales de unos conceptos que son personajes. Yo sigo perteneciendo al grupo de autores de Marvel que trabajan sólo conceptos de la historieta. Por ahora Marvel quiere que se sigan realizando, y mientras que Marvel quiera, yo querré estar ahí. Una pregunta habitual es en qué manera nos involucramos los autores de cómic en las versiones cinematográficas o televisivas. La respuesta es muy sencilla: creándolos, dándoles vida. Los autores son los responsables de que estos personajes sean conocidos en todo el mundo, y de que lleven viviendo en muchos casos 75 años. El trabajo de estos creadores ha hecho que los personajes formen parte de la iconografía del siglo XX y parte del siglo XXI, y aunque en éste último estén cambiando de medio, todavía somos necesarios.

Primera portada del Capitán América,
de Jack Kirby.
Estamos promocionando el Capitán América. Es uno de los primeros personajes de Marvel, fue creado en 1941. Nace en plena Segunda Guerra Mundial, y sus primeras aventuras fueron combatir contra los alemanes. No se sabía muy bien cómo lo hacía, si salía de EEUU para luchar en el frente. Después ya se han contado historias mucho más completas gracias a un fenómeno que llamamos Retro-Continuidad. Después de la Segunda Guerra Mundial, el personaje desaparece de la imprenta, de los mercados... La imprenta de superhéroes en los años cincuenta es prácticamente olvidada, salvo algunos títulos como Superman o Batman. A finales de los 50, DC Comics empieza a redactar Green Lantern y Flash, y esto crea lo que se llama la Silver Age de los cómics. Y en ese fenómeno el Capitán América renace en su gloria actual. En esta época se incorpora al equipo como guionista Stan Lee (uno de los editores jefes de la editorial), y Jack Kirby vuelve a darle vida.
Yo personalmente como autor de cómics me encuentro en la disyuntiva de qué prefiero, si trabajar con personajes con los que tengo una cierta conexión emotiva, o el reto profesional de trabajar con personajes que nunca me han gustado ni interesado. A diferencia de Superman, en el que trabajé muchos años, el Capitán América a mi sí es de los que me han interesado. Me he sentido vinculado como aficionado desde sus inicios, no en los 40, sino en los 60 con Jack Kirby, o con Jim Steranko, que es el gran dibujante pop de esos años por excelencia de Marvel. Le aportó un grafismo y una creatividad a su historieta totalmente distinta de la habitual secuencia de viñetas cuadradas y rectangulares seguidas. Él extendía el trabajo mucho más allá, conseguía unos montajes cinemáticos sorprendentes, proveniente quizás de la escuela DC. También me interesaba como guionista Steve Englehart, que trabaja en la etapa de 1971 a 1975, precisamente porque es una de las etapas más convulsas de la historia americana, con Nixon y el escándalo del Watergate, y todo eso quedó reflejado en las páginas del Capitán América. Hay que hacer hincapié en esto porque uno de los lugares comunes entre la gente que no es aficionada a este tipo de personajes es que alguien que lleva la bandera americana por traje, por uniforme, tiene que ser necesariamente ultra conservador, patriotero, etc. Evidentemente, algo de eso hay, pero no quita para que un autor pueda darle la vuelta a esos conceptos y convertirlos en otra cosa. Y es lo que hizo Englehart, que era un antiguo hippie. Consiguió que el villano de la historia fuera el mismísimo presidente de EEUU. Tras aquella época tan convulsa en la personalidad Steve Rogers (alter ego del Capitán), que renunció a su nombre de Capitán América y se convirtió en el Nómada, el hombre sin país.


Esta visión va a ser la que luego se trasvase al mundo del cine, porque es una visión que no intenta satisfacer al aficionado habitual, sino a un público totalmente nuevo que no conoce a los personajes, que no ha leído nunca un cómic, y al que no le interesa ese acercamiento de la historieta. La cuestión es que el éxito se los personajes Ultimate se trasvasa al cine, y el éxito cinematográfico se trasvasa al cómic. Se produce una retroalimentación en la que los personajes cinematográficos alimentan esa visión tradicional de la historieta. Para eso nace Marvel NOW!. Es una manera de actualizar a los personajes tradicionales, como Iron Man, que no le interesaba a nadie, y se vuelve el personaje más popular gracias a Robert Downey Jr. y sus películas. Se deja de lado el universo Ultimate, porque se dan cuenta de que esta jugada le va a salir más rentable. Es una reactualización, pero siempre dentro del universo tradicional, heredero del nacimiento de Marvel. El diseño de los personajes lo realizaron dibujantes que no eran los habituales de la colección. El del Capitán América es un diseño de militar, no tiene nada que ver con el traje de licra anterior.
